La inversión en investigación y desarrollo suma ya cuatro años consecutivos de caídas. En 2013 el gasto se situó en 13.052 millones de euros, lo que supone un descenso del 2,5 por ciento con respecto a 2012 y del 10,5 por ciento con respecto a 2010, cuando comenzó esta tendencia negativa, según se desprende de los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Fruto de este retroceso registrado el año pasado el desembolso en I+D que realizan de manera conjunta el sector privado y el público continúa con la pérdida de presencia en el Producto Interior Bruto (PIB). Se situó en el 1,24 por ciento, frente al 1,27 por ciento de 2012 y el 1,36 por ciento de 2011.
De la inversión realizada en 2013, las empresas aportaron 6.947 millones, un 53,2 por ciento del total y un dos por ciento menos que el año anterior. Le sigue la enseñanza superior que desembolsó 3.647 millones, lo que supone un descenso del 1,8 por ciento y el 27,9 por ciento de la cifra global. En tercer lugar queda la Administración Pública, con 2.436 millones, un 4,7 por ciento menos y un 18,7 por ciento del montante final. El 0,2 por ciento restante pertenece a las instituciones privadas sin ánimo de lucro.
El número de investigadores también sufrió recortes durante el año pasado. Este colectivo se situó en 123.582, trabajadores, lo que representa un retroceso del 2,5 por ciento en comparación con el ejercicio anterior.