Gaceta Médica Madrid | miércoles, 05 de marzo de 2014 h |

Un centenar de expertos internacionales se han reunido en el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra para participar en el Simposio Internacional “Routing Cancer Immunology and Immunotherapy: from the lab to the clinic”. Durante el encuentro, estos científicos han analizado los resultados de los ensayos clínicos actuales con inmunoterapia que, en opinión de Ignacio Melero, investigador del CIMA y de la Clínica Universidad de Navarra, “está revolucionando el tratamiento del cáncer”. Eso sí, aunque Melero ha reconocido que “los ensayos clínicos que están en marcha arrojan unos resultados excelentes de seguridad y los datos preliminares nos hablan de una eficacia sin precedentes en varias enfermedades malignas”, este investigador también ha advertido de la necesidad de “impulsar estudios más tempranos para incorporarlos a la rutina asistencial y llegar al paciente lo antes posible”.

Entre los nuevos avances ya disponibles en la práctica clínica , Kohrt Holbrook, científico de la Universidad de Stanford, en California (Estados Unidos), destacó durante su intervención inhibidores como el CTLA-4, además de señalar la futura llegada de PD-1 en un año aproximadamente. “Estos inhibidores tienen la ventaja de que se pueden aplicar a distintos tipos de tumor, su toxicidad es menor y su respuesta inmune es más duradera, lo que previene el riesgo de recaídas”, ha destacado Holbrook.

Pero este no es el único avance que se presentó en el Simposio. David Escors, investigador de Navarrabiomed, presentó una nueva herramienta de terapia génica utilizando vectores lentivirales, que tienen un periodo de incubación largo. “Curiosamente, durante el desarrollo de este proyecto, hemos descubierto un procedimiento por el que podemos generar grandísimas cantidades de unas células inmunosupresoras que aparecen en cáncer, las células mieloides supresoras. Somos los únicos que podemos generarlas en tan altos niveles sin necesidad de inducir cáncer en animales experimentales. Este procedimiento nos ha permitido predecir el comportamiento de las vacunas contra el cáncer que hemos desarrollado, antes de utilizarlos en los animales de experimentación. El hecho de poder crecer estas células in vitro en tan altos niveles nos permitirá identificar nuevas dianas terapéuticas”, ha destacado Escors.

El problema aquí, tal y como denunciaron los científicos españoles durante el evento, es la escasez de recursos económicos para investigar en este campo. “Otros colegas en los países de nuestro entorno cuentan con más recursos financieros. Hay que priorizar el tema de investigación y dotarla de recursos para atraer multidisciplinariamente a los mejores investigadores. Además, tenemos que aprovechar también la interacción con los profesionales españoles de la industria farmacéutica, puesto que forman equipos extraordinariamente cualificados. Confiemos en que la situación cambie dados los resultados y el impacto de estas líneas de trabajo experimental y aplicado”, ha afirmado Melero. En este sentido, Escors ha añadido que, además de incrementar directamente los fondos de investigación para los proyectos, “la solución más práctica viene por proporcionar a los investigadores una carrera clara, con objetivos bien definidos y con una estabilidad a medio-largo plazo”.

Actualmente en Navarra se está aplicando la inmunoterapia en pacientes utilizando los tratamientos de “última generación”, como los anticuerpos monoclonales humanizados que, en algunos casos, bloquean rutas que inhiben al sistema inmune y, en otros, activan directamente a las células del sistema inmune. “Hay varios grupos de investigación básica que están estudiando los mecanismos por los que estos fármacos funcionan. De todos modos, queda mucho camino que recorrer. Por ello, es necesario que los grupos de investigación de los distintos centros de la Comunidad Foral colaboren para que haya una transferencia de material y experiencia que permita romper las barreras del conocimiento. La creatividad de los investigadores permitirá desarrollar nuevos tratamientos, conocer mejor cómo funciona el sistema inmune y cómo emplearlo para tratar el cáncer”, considera Escors.