Tras reunirse con asociaciones y sindicatos, Mónica García llegó el viernes a su encuentro con el Consejo General de Enfermería con los deberes hechos. “Tenía conocimiento de muchos temas de la Enfermería porque ya habían pasado otros colectivos”, comentó su presidente, Florentino Pérez Raya, al término de una reunión que acercó aún más las posturas del CGE y el Ministerio de Sanidad para la reclasificación de las enfermeras dentro de un único grupo A, tal y como publicó GM. Pero, además, la organización entregó un dossier a la nueva ministra con hasta 11 “prioridades” para convertir a la Enfermería en una “pieza fundamental” en la redefinición del Sistema Nacional de Salud.
Entre las reivindicaciones del colectivo enfermero, la principal es esa reclasificación de sus profesionales a un único grupo A unificado, sin subgrupos. Se trata de una demanda histórica de las enfermeras y fisioterapeutas dentro de la administración pública contra la “discriminación” profesional y laboral que perpetúa la normativa vigente, según vienen reiterando tanto sindicados como el propio Consejo General de Enfermería. “Son leyes obsoletas, que incluso hablan de diplomados en Enfermería, y es preciso abordar su modificación”, demandó Pérez Raya, quien estuvo acompañado del secretario general del CGE, Diego Ayuso; su vicepresidenta I, Raquel Rodríguez Llanos; y el vicepresidente III de la organización, José Luis Cobos.
Asimismo, en el dossier que entregó el CGE a Mónica García se propone que se modifiquen “las normas necesarias” para que desde la actual clasificación A2 se pueda optar a los puestos de trabajo a los que actualmente solo tienen acceso los incorporados en el grupo A1, como determinados puestos de gestión. “No puede ocurrir que nos lleguen compañeros y compañeras de cualquier provincia de este país que están en cargos de gestión y los están poniendo en la calle precisamente porque los tribunales se remiten a estas leyes, con más de dos décadas a sus espaldas”, criticó el presidente del Consejo.
Prescripción de medicamentos
Una de esas leyes que, en opinión del colectivo, requiere una actualización es la de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS), puesto que “no se adapta a la realidad del actual ámbito de las titulaciones de los profesionales sanitarios (antiguos Licenciados y Diplomados, hoy ya Graduados)”. También se instó desde el CGE a promover una modificación de Ley del Medicamento para “avanzar en el ámbito competencial de las enfermeras en materia de prescripción de medicamentos”.
Precisamente, la indicación de medicamentos y productos sanitarios es un tema prioritario para el Consejo General de Enfermería. Recientemente, el BOE publicó una nueva guía que permite a las enfermeras prescribir ibuprofeno y paracetamol para el tratamiento de la fiebre. La Enfermería quiere seguir dando pasos en la llamada ‘prescripción enfermera’ –técnicamente, indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos– y considera “imprescindible” culminar el sistema de acreditación de las enfermeras en esta materia por parte de las comunidades autónomas y el INGESA. En esta línea, solicitaron a la titular de Sanidad su puesta en marcha en las CCAA promoviendo que éstas desarrollen protocolos específicos e implementen los sistemas para la emisión de órdenes de dispensación enfermera.
Ratios, especialidades y diplomas
Otro de puntos tratados durante la reunión con Mónica García fue la adecuación de las plantillas del SNS a la ratio de los países del entorno para acabar con el déficit de enfermeras en España, que se calcula en más de 90.000. En su dossier, el CGE insta al Ministerio a establecer estrategias y políticas en materias de recursos humanos y a acordar con Universidades un aumento de plazas para los estudios de Enfermería. Actualmente, según expusieron, se gradúan en España unas 23 enfermeras por 100.000 habitantes, mientras que en Europa se alcanzó una media de 44,3 enfermeras.
No en vano, desde el Consejo General de Enfermería incidieron sobre otra de sus reivindicaciones históricas, el reconocimiento “real y definitivo” de las especialidades de Enfermería. Así, solicitó promover la creación de la categoría de enfermero especialista en todos los servicios de salud, así como impulsar la progresiva implantación de puestos de trabajo específicos para el enfermero especialista. Además, requirió a la ministra en su dossier “llevar a cabo un profundo análisis de la especialidad de Enfermería de Cuidados Médico-quirúrgicos”. En cuanto a los Diplomas de Acreditación y los Diplomas de Acreditación Avanzada, propuso abordar la regulación de diferentes Diplomas que, según señalaron, “podrían dar cabida al desarrollo profesional de diferentes áreas de Enfermería.
Nuevos roles y competencias
El colectivo enfermero quiere tener mayor presencia en espacios profesionales donde, hoy por hoy, su acceso es limitado. Algunos de ellos, relacionados con prácticas emergentes para dar respuesta a problemas sanitarios. Así, menciona la enfermera de salud pública e higienista, la enfermera de enlace, la enfermera en empresas o la enfermera escolar. Sobres esta última, el CGE y otras 15 entidades solicitaron al Ministerio una Ley Nacional de Enfermería Escolar para su incorporación en todo el territorio nacional. Pero, además, la organización de enfermeras trasladó al departamento de Mónica García que es “imprescindible” visibilizar el papel de la Enfermera Responsable en la prestación de ayuda para morir, “siendo clave la inclusión y definición especifica en el Manual de Buenas Prácticas del Ministerio de Sanidad”.
En otro orden de cosas, Florentino Pérez Raya insistió además en abordar los cambios que requiere el Sistema Sanitario para el abordaje de la cronicidad. “La ministra entiende que la Enfermería puede hacer una gran labor para desarrollar su competencia y conseguir una sanidad mejor”, aseguró. Para ello, el CGE recomendó aumentar el número enfermeras, potenciar el trabajo de las enfermeras especialistas en Enfermería Familiar y Comunitaria e involucrarlas en los planes de acción nacionales para abordar la atención a la cronicidad y, en definitiva, “contribuir a la calidad, eficiencia y sostenibilidad en salud”, precisaron.
Por último, el Consejo pidió mejorar las condiciones de trabajo de estos profesionales, como la conciliación laboral y las mejoras retributivas; y se volcó en la defensa del rol enfermero en la gestión clínica, “una vez que ha sido convenientemente definido y aceptado por todos”, así como de los que ya están desarrollando esta función.
