GM Madrid | lunes, 10 de abril de 2017 h |

Investigadores del Instituto de Salud Carlos III, en colaboración con el Fondo de Acción Global para las Infecciones Fúngicas, la Fundación Internacional de Dermatología, la Escuela de Higiene y de Medicina Tropical de Londres y la Universidad de Manchester, han conseguido la inclusión de tres antifúngicos de gran importancia terapéutica en la lista de medicamentos esenciales de la Organización Mundial de la Salud.

Los solicitantes iniciaron el proceso con la su OMS a finales del pasado año para que incluyera el itraconazol (cápsulas y suspensión oral), voriconazol (cápsulas y solución intravenosa) y natamicina (gotas al 5%) en dicha lista que se actualiza desde 1997 y contiene fármacos considerados imprescindibles para cubrir las necesidades de atención sanitaria terapéutica prioritaria.

El objetivo de esta lista es que los medicamentos incluidos en la misma de medicamentos esenciales estén disponibles globalmente a un precio asequible, a las dosis y formulaciones adecuadas y con una calidad garantizada. Cada dos años, la OMS convoca a un comité de expertos para revisar y actualizar la lista de medicamentos esenciales que actúa de modelo para las respectivas listas de los países miembros.

Este año, tres antifúngicos que han salvado la vida a cientos de miles de pacientes en el mundo, han alcanzado la categoría de medicamentos esenciales. Para los promotores de la iniciativa, hoy es “un día clave en la lucha contra las infecciones fúngicas”.

En la actualidad, más de 300 millones de personas de todas las edades sufren una infección fúngica grave lo que ocasiona más de 1,6 millones de muertes anuales. Muchas de ellas serían evitables con un diagnóstico y tratamiento adecuado. Las infecciones fúngicas están “ocultas” ya que son consecuencia de otros problemas de salud como el asma, el SIDA, el cáncer, los trasplantes de órganos o la administración de corticosteroides.