El número de afiliados a la seguridad social en el sector sociosanitario ha experimentado una caída del 11,17 por ciento en los últimos 12 meses. En este periodo se han perdido 167.512 puestos de trabajo, a pesar de la mejora registrada el pasado agosto.
Durante el pasado mes, los trabajadores en actividades sanitarias y servicios sociales ascendió a 1.332.688, lo que supone un crecimiento del 1,34 por ciento con respecto al mes anterior. Sólo dos áreas han obtenido mayores crecimiento: el empleo doméstico y la hostelería.
Las actividades sanitarias han sufrido de manera especial los recortes de la Administración y la crisis económica. Después de la construcción es el sector en el que se ha producido una mayor destrucción de empleo en los últimos 12 meses. La destrucción de empleo supera con creces la media nacional que se ha descendido un 3,36 por ciento.
Ante las cifras registradas, el sindicato CSI-F ha reclamado al Gobierno que amplíe la oferta de empleo público en los próximos presupuestos.
