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N.S./C.M.L. Madrid | viernes, 15 de junio de 2018 h |

“El panorama terapéutico en cáncer de vejiga avanzado está cambiando de forma muy rápida. La llegada de muchos inmunoterápicos ha mejorado bastante los datos de eficacia y estas terapias dirigidas van a marcar el futuro cercano con estudios más potentes, estudios de registro y nuevas aplicaciones”. Los oncólogos Daniel Castellano del Hospital 12 de Octubre, y Álvaro Pinto del Hospital Universitario La Paz, explican las novedades en este tipo de tumores tras la celebración de ASCO. Muchas de estos avances —indican— han venido de la mano de los inhibidores del FGFR.

Uno de estas novedades fueron los datos erdafitinib. “La tasa de respuesta está entre el 30 y el 35 por ciento en pacientes con esta mutación, por lo que se ha empezado a seleccionar pacientes con cáncer de vejiga con mutaciones específicas”, asegura.

Por su parte, Álvaro Pinto, oncólogo del Hospital Universitario La Paz, destaca que una teórica ventaja de esta estrategia terapéutica es que “dispondríamos de un biomarcador, las alteraciones en FGFR, para seleccionar a los pacientes candidatos a estos tratamientos”.

Además, otra nueva familia de fármacos, los conocidos como ADC (antibody drug conjugates), también ha aportado nuevos datos, en este caso con Enfortumab Vedotin, un conjugado de un antineoplásico con un anticuerpo anti-nectina 4 (una proteína que expresan más del 80 por ciento de los tumores uroteliales). “Su administración se asocia a una tasa de respuestas elevada, por encima del 40 por ciento”, indica Pinto.

Este oncólogo también repasa los estudios fase II en un contexto de neoadyuvancia: Abacus (con Atezolizumab) y PURE-01 (con Pembrolizumab). Ambos demostraron que la inmunoterapia consigue una tasa de respuestas elevada, en torno al 30 por ciento. “A falta de confirmación en ensayos comparativos con el estándar, que es la poliquimioterapia basada en Cisplatino, abren una puerta a un futuro tratamiento eficaz y menos tóxico, como sería la inmunoterapia, en esta indicación”, indica.

Los tumores uroteliales metastásicos no han visto claras mejorías en su tratamiento en los últimos 30 años. La llegada, primero de nuevos quimioterápicos como la Vinflunina, y sobre todo posteriormente de la inmunoterapia, ha mejorado las opciones para nuestros pacientes, pero queda mucho margen de mejora. “Necesitamos tratamientos más eficaces, y biomarcadores predictivos que nos permitan individualizar el tratamiento de cada paciente en concreto, para poder hacer una verdadera medicina personalizada”, apunta.

Con todo, el panorama terapéutico en cáncer de vejiga avanzado está cambiando mucho de forma muy rápida. “La llegada de muchos inmunoterápicos ha mejorado bastante los datos de eficacia y estas terapias dirigidas que están llegando ahora van a marcar el futuro cercano con estudios más potentes, estudios de registro y nuevas aplicaciones”, concluye.


La llegada la inmunoterapia ha mejorado “bastante” los datos de eficacia y estas terapias dirigidas