Por B.D.

CÁNCER DE MAMA

Según ha explicado Miguel Martín, presidente del Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama y uno de los ponentes en el encuentro, a pesar de las dificultades técnicas que puedan encontrarse, el hecho de que la biopsia líquida permita estudiar la evolución del tumor a lo largo de su historia es uno de los motivos que explican su superioridad frente a las alternativas disponibles. También es la clave sobre la cual se afianzará su implantación en el futuro: “La dificultad radica en que estamos ante el equivalente de buscar una aguja en un pajar, una mutación o una diana entre millones de posibilidades, pero hay técnicas que van facilitando el proceso”.

La disponibilidad de medicamentos para múltiples dianas que se da en el cáncer de pulmón, es un escenario ideal. “En cáncer de mama el número de terapias es cada vez mayor”, ha añadido.

Él destaca la doble dimensión de la biopsia líquida: su vertiente experimental, cada vez más sensible y capaz de detectar cantidades mínimas de ADN en sangre y, por otro lado, su aplicación práctica, ligada al desarrollo de fármacos para las mutaciones identificadas en cada contexto clínico.

En Santiago de Compostela, Miguel Martín ha compartido los hallazgos del estudio MIRROR, en el cual se han identificado en biopsias de metástasis variantes genómicas que no estaban presentes en el tumor original y que podrían servir de soporte en la selección de terapias y la búsqueda de biomarcadores para el desarrollo de nuevos tratamientos para el cáncer de mama metastásico.

Por su parte Luis Manso, del Hospital Universitario 12 de Octubre, inscribe los avances en biopsia líquida en el marco de la medicina personalizada, incluyendo el mayor conocimiento de las mutaciones que están detrás del tumor y el diseño de tratamientos a la carta basados en esos hallazgos. “La biopsia líquida —ha recordado— es mucho menos agresiva y proporciona información evolutiva sobre el tumor. Es un referente en el tratamiento del cáncer y se irá implementando para conocer, de manera personalizada, qué es mejor para cada paciente. El concepto de que el cáncer es una enfermedad está obsoleto”.

Manso ha dado a conocer los resultados del estudio SOLAR 1, el primer trabajo que muestra que la adaptación de la terapia en función de la presencia de la mutación PIK3CA en cáncer de mama avanzado es una estrategia predictiva de mejoría.