Informar y concienciar sobre los trastornos del sueño, la preocupación por el aumento de consumo de fármacos para dormir, como las benzodiacepinas, y la necesidad de una especialidad en medicina del sueño, han sido los puntos que la Federación Española de Sociedades de Medicina del Sueño (Fesmes) ha transmitido en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados.

En dicha Comisión, han estado presentes, amén de diputados de variopinto signo político, Carlos Egea Santaolalla, presidente de Fesmes, y Francisco Javier Puertas Cuesta, jefe del Servicio de Neurofisiología y la Unidad del Sueño del Hospital Universitario de la Ribera (Valencia).

Carlos Egea Santaolalla.

Durante su intervención, Egea ha explicado que desde el año 1900 “se han perdido casi dos horas de sueño”, y que esto representa un problema para una correcta higiene del sueño, que tiene “una relación clara con la supervivencia y la calidad de vida”. “Hay que hacer divulgación para que la sociedad sepa que, si mantienen su sueño, podrá vivir más y mejor y tener un envejecimiento saludable”.

Egea también ha mencionado datos sobre la situación de los problemas del sueño en España. Ha destacado que 24 millones de españoles sufren trastornos del sueño, y entre 6-7 millones tienen insomnio. “Y esto es algo que genera problemas con la salud mental, ya que genera depresión”, señala.

Además, el presidente de Fesmes ha asegurado que una buena higiene del sueño reduciría en un 40 por ciento el problema del insomnio crónico, y ha incidido en la importancia de la concienciación de forma no punitiva para que la población tenga claro que este es un problema de salud pública.

Consumo de fármacos para dormir y formación

Respecto a otro de los asuntos que preocupaban a la Federación, el elevado consumo de fármacos para dormir, Egea afirma: “Llegamos a un punto en el que la gente no puede dormir sin tomar benzodiacepinas y ansiolíticos”.

Por otra parte, y relacionado con este consumo elevado, Puertas ha explicado que los trastornos del sueño “están tensionando los servicios sanitarios, a nivel de prescripción de hipnóticos y listas de espera”.

“El poco tiempo que la atención primaria tiene para tratar está provocando el incremento de fármacos que está proveyendo la farmacia o que se está comprando en otros sitios. Muchas personas están tomando fármacos de dormir, y como producen tolerancia, pasarán la raya del abuso, y entonces tendremos dos problemas: tratar el insomnio y el abuso de drogas”, afirma Egea.

Francisco Javier Puertas Cuesta.

La formación específica ha sido también una de las demandas de las intervenciones de ambos profesionales. Puertas ha explicado que se deben ofrecer “cauces oficiales de formación” como contempla la legislación en el área de capacitación específica, para “dar salida a esta demanda, y establecer una coordinación en toda la escala asistencial”.

Como última demanda, Puertas ha mencionado la especialización médica como eje de un buen desarrollo de la medicina del sueño. “Es el ejemplo perfecto de una colaboración interdisciplinar y una oferta de formación que va más allá de las especialidades originales”, señala.

“Si no nos planeamos en España una especialización como otros países, nuestros médicos tendrán un reconocimiento oficial peor” destaca el jefe de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario de la Ribera.

Plana política

En la Comisión de Sanidad, varios diputados han expresado las preocupaciones de sus respectivos grupos parlamentarios.

Juan Luis Steegmann, portavoz de Sanidad del Grupo Parlamentario Vox, ha puesto en valor la proposición no de Ley que se aprobó en noviembre de 2022, presentada por el PSOE, sobre trastornos del sueño.

“Vox propuso una enmienda que pedía una actualización del documento sobre unidades de sueño y esperamos que esto ya se haya realizado”, señala Steegmann.


María Teresa Angulo, portavoz de Sanidad del Grupo Parlamentario Popular, ha asegurado que estos trastornos “pueden empezar a considerarse un problema de salud pública”.

“Creemos que en necesario para que los pacientes tengan una respuesta ágil y eficiente, y que los profesionales que se dedican a los trastornos del sueño tengan una mejor formación específica”.

Respecto a esto, Angulo ha recordado que su Grupo propuso que, en el marco del Real Decreto 589/2022 por el que se regulan la formación transversal de las especialidades en Ciencias de la Salud, se estableciera la formación y acreditación en medicina del sueño.

Como reflexión final, la portavoz de Sanidad populas ha incidido en que la sociedad no tiene “la suficiente consciencia” del problema de salud que supone un tratorno del sueño, ni de las repercusiones que tiene para la vida diaria.

Para concluir la Comisión de Sanidad, Julio Navalpotro, del Grupo Parlamentarios Socialista, ha explicado que los puntos que más preocupan a su formación política son la alteración en la salud mental que provocan los problemas del sueño y el consumo elevado de fármacos para dormir. “Se nos está yendo de las manos”, afirma Navalpotro sobre este último aspecto.


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