francisco rosa Zamudio | viernes, 01 de junio de 2012 h |

La compañía portuguesa Bial inauguró oficialmente su nueva planta en el Parque Científico y Tecnológico de Vizcaya, en Zamudio, en un encuentro que contó con la presencia del Príncipe de Asturias. Un acto en el que la compañía confirmó que acometerá una inversión cercana a los 40 millones de euros hasta 2018 para desarrollar en estas instalaciones una nueva línea de vacunas a base de proteínas recombinantes para el tratamiento de las alergias.

De esos 40 millones, 12 pertenecen al gasto que ya se ha realizado para poner en marcha este centro, mientras que los 28 millones restantes se invertirán en los próximos años con el fin de avanzar en los proyectos de desarrollo de vacunas alergénicas y medios de diagnóstico que la compañía tiene en marcha. “Pensamos que esta inversión en Bilbao servirá, sobre todo, como catapulta para avanzar en la internacionalización de nuestro negocio en el área de las vacunas”, confirmó Luis Portela, presidente del Grupo Bial.

A este respecto, cabe señalar que Bial cuenta ya con un amplio catálogo de medicamentos, con la que llega a un total de 50 países, y que la expansión en el campo de las vacunas dependerá del éxito en las líneas de investigación que tiene actualmente en marcha. Hasta ahora, los productos que componen su catálogo en esta área solo llegan a España, Italia, Grecia y Cuba, además de copar gran parte del mercado portugués.

Para dar el salto internacional con sus vacunas, la compañía farmacéutica lusa ha optado por la investigación y el desarrollo de terapias conformadas en base a proteínas recombinantes, con la que se asegura “que la reproducción de la molécula es idéntica y no se producen mutaciones”, según aclaró Alberto Martínez, responsable de I+D de la planta de Zamudio.

Martínez también confirmó que el potencial de las vacunas que piensa desarrollar Bial, las cuales serán “principalmente subcutáneas”, radica en la originalidad de la línea de investigación seleccionada. Hasta el momento, solo hay dos empresas, “una en Austria y otra en Alemania”, que están realizando estudios con terapias recombinantes en el campo de las alergias, aunque los análisis se centran en alérgenos típicos de su geografía.

Compromiso con la I+D

Quien también intervino en la presentación fue el director general de Bial en España, Íñigo Pagoaga, quien hizo hincapié en el compromiso de la compañía con la I+D. “Este proyecto es una muestra más de nuestro compromiso con las inversiones más a largo plazo. Pese a las dificultades económicas que nos afectan a todos, hemos demostrado que nuestra I+D está al margen de los vaivenes del mercado”, señaló Pagoaga, quien añadió que Bial contribuirá con “las vacunas del futuro a reforzar el arsenal terapéutico del que disponen los especialistas para el tratamiento de las alergias”.

Con respecto a las previsiones de ventas no quiso aventurarse a concretar cifras, aunque sí confirmó que desde el laboratorio confían en que “el crecimiento de estos productos será exponencial”. Gracias a ello, las nuevas vacunas de Bial se convertirán en un reclamo perfecto para atraer a nuevos socios en el extranjero. “La idea es convertirnos en un partner atractivo para otras empresas a nivel internacional”, dijo Pagoaga.

Además, junto al trabajo que están realizando en el área de las terapias recombinantes, los responsables de Bial destacaron su compromiso con el desarrollo de nuevos productos en el área de las alergias, en el que pretenden convertirse en una referencia a nivel internacional. Sobre este particular, confirmaron que la inversión que van a realizar permitirá la investigación y producción de vacunas antialérgicas, autovacunas y vacunas microbiológicas, así como diagnósticos in vivo e in vitro.

Los responsables esperan que esta inversión servirá como “catapulta” para la internacionalización

Durante la presentación oficial de la nueva planta de Bial, Luis Portela, presidente de la compañía lusa, incidió mucho en el hecho de que el ADN de la farmacéutica está determinado por las relaciones entre Portugal y España. Para escenificarlo, el acto contó con autoridades de ambos países, entre ellas el Príncipe de Asturias, que se encargó de inaugurar esta nueva etapa para el laboratorio.

Portela recordó, además, que parte de su fortaleza en el área de las vacunas procede de la compra en 1998 de Arístegui, laboratorio de origen vasco que da nombre a la unidad de negocio centrada en la inmunoterapia alérgica. “Desarrollamos el área de vacunas aquí porque los trabajadores de Arístegui contaban con un know-how importante”, explicó. Asimismo, mostró su satisfacción porque los nuevos proyectos de Bial “crearán puestos de trabajo” en los próximos años en España y cerró su discurso lanzando un mensaje que sonó a órdago: “Hoy por hoy no sentimos a Bial como la mayor farmacéutica portuguesa, sino ibérica”.

Desde la compañía esperan un crecimiento exponencial de las vacunas antialérgicas recombinantes