El Partido Popular se ha convertido en el primero en liberar su programa electoral para el próximo 23-J, con el compromiso con la sanidad presente entre sus propuestas. La hoja de ruta para el sector, que ya fue avanzada en un acto sectorial en Valencia mediante un decálogo con las principales medidas que la formación buscaría acometer en el caso de liderar el Ejecutivo, se ve así ampliada con el documento elaborado desde Génova y presentado en sociedad en la Casa América por Alberto Núñez Feijóo.

Intentaré pactos de estado con otros partidos y con los agentes sociales y económicos, porque es la única forma de que España recupere su unidad dañada”, ha señalado el presidente del PP, que se ha referido de manera explícita a la sanidad como uno de los ámbitos que requiere consensos amplios. “El gobierno lleva cinco años sin acometer el debate en profundidad que requiere el blindaje y el sostenimiento del Sistema Nacional de Salud (SNS), especialmente en atención primaria”, ha valorado. Como ha recordado el ex presidente de la Xunta de Galicia, “somos uno de los países que más tarde incorporamos los tratamientos innovadores”.

“El gobierno lleva cinco años sin acometer el debate en profundidad que requiere el blindaje y el sostenimiento del SNS, especialmente en atención primaria”

Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP

Como parte del programa electoral, que aglutina ‘365 medidas para la reconstrucción económica, social e institucional’, se han desmarcado 50 principales. Entre ellas, figura la promoción de un Plan de Choque en atención sanitaria “para dar solución al grave problema de déficit de especialistas” y la aprobación de “un Plan Nacional contra las agresiones a los profesionales sanitarios”. Asimismo, también aparece la propuesta de un Plan Nacional para la salud física y mental a través del Deporte; la ampliamente demandada reforma del sistema de financiación autonómica; la aprobación de un Plan de Lucha contra las adicciones en la infancia y la adolescencia; y la puesta en marcha una estrategia nacional de atención a la soledad no deseada.

Dentro del epígrafe dedicado a las reformas y medidas que atañen al SNS, el PP se compromete a estudiar todo lo que se ha visto afectado a raíz de la COVID-19 en términos de funcionamiento del sistema y atención sanitaria. En este sentido, apuesta por su corrección “con mejor gestión, más innovación, mejor política, más previsión y, sobre todo, un mayor acuerdo y consenso con toda la comunidad sanitaria española, los pacientes y las administraciones autonómicas”. “Es urgente poner en marcha políticas de prevención y vida saludable. La investigación científica puede permitir marcar ambiciosos objetivos de país y destinar todo lo posible a conseguir que enfermedades como el cáncer sean curables”, añaden.

AP, cáncer y acceso a la innovación

Así las cosas, concretan su objetivo “proteger y fortalecer el SNS” con las acciones del programa comprendidas entre los números 120 y 144. Entre ellas, se sitúa el avanzado Plan de Choque en atención primaria en el que se adelantan “medidas inmediatas”, como incentivos para Medicina de Familia y Pediatría con el fin de hacer más atractivas las plazas.

El partido propone además mejorar el programa formativo de la primera disciplina; la creación del título de especialista de Urgencias; la reforma de la LOPS “para potenciar las capacidades de categorías como la enfermería o la farmacia”; o el impulso a nivel nacional la figura del personal administrativo sanitario. En este último punto, avanzan su intención de desarrollar “reformas legislativas destinadas a reducir la burocracia en los procesos administrativos que acompañan a la actividad clínica”.

Del mismo modo, figuran otras propuestas ya anunciadas, como las 1.000 plazas formativas de medicina familiar para la oferta 2024 o la reforma de la jubilación activa mejorada para especialistas en Familia y Pediatría, las cuales se combinan con otras medidas de fomento de la digitalización o habilitación de mecanismos de selección de personal “más ágiles”, con mención concreta al concurso de méritos.

Entre las grandes promesas del programa popular se encuentra la voluntad de que España se convierta en líder de la implementación del Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer. Así, apuestan por garantizar a todos “las mismas prestaciones en cuanto a la prevención y tratamiento de esta enfermedad”, así como la promoción de una ley específica en materia de defensa de los pacientes oncológicos “que recoja acciones de protección social y laboral para personas en tratamiento o tras el tratamiento”.

Además, adelantan como medida la reforma de los procesos de incorporación de la innovación, “especialmente en el ámbito de los medicamentos, avanzando en un procedimiento de autorización, financiación y compra de medicamentos más transparente en base a necesidad asistencial y resultados”. El objetivo final, asevera el programa, es “acortar los elevados tiempos de autorización de la innovación terapéutica”.

Otras medidas del programa

  • Una nueva Ley General de Sanidad. Actualización de la gobernanza del SNS y abordar la integración entre los sistemas sanitario y sociosanitario.
  • Fortalecimiento de la Formación Sanitaria Especializada. Actualización de los programas formativos de todas las especialidades y aumento de las plazas de grado de Enfermería.
  • Retención y atracción de talento sanitario. Reducción de los niveles de temporalidad, incentivando el itinerario profesional y desarrollando un modelo de carrera que ligue los incentivos a los resultados en salud.
  • Nueva Estrategia de Salud Mental. Centrada en la atención temprana, con promoción de programas en las escuelas y contemplando el desarrollo de un Plan Nacional de Prevención del Suicidio.
  • Actualización de la Estrategia de Cronicidad en el SNS. Desarrollo de un modelo de atención proactivo y fomento de la atención domiciliaria; acciones decididas en enfermedades respiratorias.
  • Retomar la Agencia Estatal de Salud Pública. Abordaje la priorización de la coordinación antes crisis sanitarias y el despliegue de los sistemas de vigilancia en el marco de una nueva Ley de Pandemias.
  • Mejor acceso a ensayos clínicos. Impulso de una base de datos a nivel nacional para que los pacientes conozcan su existencia.
  • Reserva estratégica de medicamentos y Estrategia Nacional de Vacunación. Definición y refuerzo de los mecanismos de coordinación ante la posible necesidad de una vacunación masiva.

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