Sandra Pulido Madrid | viernes, 26 de abril de 2019 h |

Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) participan con el Instituto Pasteur en la creación de una nueva generación de antibióticos que evitan la aparición de resistencias. Se trata de un nuevo tipo de antibióticos programables, creados a medida, para atacar en especial a las bacterias resistentes o virulentas.

Los investigadores han desarrollado lo que han denominado como una ‘bomba genética programable’. “Nuestro antibiótico, portado por bacterias centinela, es una toxina (la bomba genética) programada para activarse y matar sólo cuando reconoce a una bacteria mala, ya sea virulenta o resistente a antibióticos”, explica en un comunicado Alfonso Rodríguez-Patón, profesor del Departamento de Inteligencia Artificial de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Informáticos de la UPM.

Esta bomba es transmitida por la bacteria centinela a sus bacterias vecinas mediante un proceso llamado conjugación. “La conjugación es un mecanismo de transmisión de ADN empleado por las bacterias, y que nosotros hemos programado en las bacterias centinela para enviar la bomba genética a las bacterias vecinas. Si la bomba accede a una bacteria mala detectará determinadas señales moleculares como la virulencia o la resistencia a antibióticos que la activarán matando a dicha bacteria. Sin embargo, si la bomba genética es introducida en una bacteria buena no le hará nada”, señala el investigador.

Este mecanismo de activación selectiva de la bomba se puede programar para atacar a diferentes bacterias resistentes y es posible gracias a una molécula denominada “inteína”.

Los resultados de esta nueva generación de antibióticos se han comprobado en organismos vivos como el pez cebra y crustáceos infectados con la bacteria acuática del cólera (Vibrio cholerae). “Hemos conseguido que nuestro antibiótico elimine el cólera virulento y resistente a antibióticos de los peces cebra infectados y que el resto de bacterias presentes en dichos peces no se vean afectadas y sobrevivan. Esto es relevante porque el cólera también afecta a más de un millón de personas cada año y en casos graves ocasiona la muerte”, añade Rodríguez-Patón