Equipo del Centro de Salud Virxe Peregrina.

Tras quedar a las puertas de la victoria en los Pemios BiC en dos ocasiones (2019 y 2021), el Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra y el Hospital comarcal do Salnés, en Vilagarcía de Arousa, junto con 44 centros de salud, nueve puntos de atención continuada y los centros sociosanitarios que integran el Área Sanitaria de Pontevedra e O Salnés, han logrado alzarse con este premio.

Esta organización integrada de atención primaria, perteneciente al Servizo Galego de Sáude, da cobertura a un total de 300.000 pacientes.

De manera especial, el galardón reconoce la actividad de los centros de salud de Virxe Peregrina, situado en el centro de Pontevedra, y el de Vilanova de Arousa por su innovación y propuesta de cambio.

El primero de ellos está liderado por Coro Sánchez. Una de sus grandes líneas de trabajo tiene que ver con la población mayor y se materializa en su proyecto de investigación para la atención de pacientes mayores con alto riesgo de aislamiento.

En centro lleva a cabo talleres para fomentar la capacitación tecnológica de pacientes, “una iniciativa didáctica orientada a mejorar sus habilidades en la solicitud de cita electrónica y uso de la página del Sergas”.

Formación MIR

Equipo del Centro de Salud de Vilanova de Arousa.

Por su parte, el Centro de Salud de Vilanova fue seleccionado por el MIR número 60 para formarse como especialista. Este centro, liderado por Antonio Ángel Regueiro, atesora una larga tradición innovadora e investigadora. La entidad ha participado en la aplicación de Telea, un programa de atención no presencial desarrollado por el Sergas antes de la COVID. Participa además en ‘Practicum direct’, un programa de simulación de toma de decisiones en pandemia.

Para conocer todos los detalles en profundidad, GACETA MÉDICA entrevista a sus dos responsables, Coro Sánchez y Antonio Regueiro, responsables de dos centros de atención primaria que forman parte de esta OSI.

Como denominador común, ambos centros cuentan con un plan de salud local elaborado por profesionales de cada centro, con apoyo técnico de la Consellería de Sanidade. Tras realizar un análisis completo de sus fortalezas y debilidades, el documento apuesta por reforzar la atención primaria adaptando la asistencia sanitaria a la demanda, con los recursos disponibles en la actualidad.

Pregunta. ¿Qué ventajas aportan este tipo de estructuras?

Respuesta Coro Sánchez: Todas. Poder orientar los servicios que se prestan a las nuevas necesidades poblacionales implicando a todos los actores del proceso y evaluando los resultados.

Respuesta Antonio Ángel Regueiro: Centra la atención en el paciente y su entorno social y familiar, mejora la longitunalidad en la atención y la continuidad de cuidados

P. ¿Cuáles son las fortalezas de estos dispositivos?

CS. Las inherentes al primer nivel asistencial: accesibilidad, longitunalidad, vocación de servicio y profesionalidad.

AR. Mejora la integración de servicios muchas veces no homogéneos, facilita la gestión y los liderazgos, apoya el trabajo colaborativo y formación de equipos multidisciplinares

P. ¿Y las áreas de mejora?

CS. Comenzando por la difusión de la cultura de calidad en todas las organizaciones y desde nuestro nivel retomando el protagonismo en la gestión de la salud de nuestros pacientes en todas sus dimensiones. Las necesidades de grupos poblacionales específicos, la atención a la nueva pandemia de salud mental, la educación poblacional como base y acceso al sistema.

AR. Llevado a la práctica, la variabilidad en cuanto a centros y servicios es muy grande, y cada uno de ellos tiene una situación interna diferente que puede dificultar la consecución de objetivos integrales

P. ¿Qué supone para esta OSI la calidad en la atención al paciente una vez superada la fase aguda de la pandemia?

CS. Fundamentalmente un cambio hacia una atención centrada en la salud poblacional y no solo a nivel individual, retomando las actividades preventivas y de promoción de la salud desde la perspectiva comunitaria.

AR. Nos obliga a retomar la atención que hemos dejado de dar sobre todo a pacientes crónicos y a tareas de prevención y promoción, además de actividades comunitarias que ya empezamos a desarrollar de nuevo.

P. ¿Se ha transformado de algún modo con la experiencia de estos últimos años?

Coro Sánchez.

CS. La pandemia ha marcado la necesidad de iniciar cambios en un modelo de atención primaria ya obsoleto que había perdido esa visión comunitaria y que debe recuperar su protagonismo coordinando y gestionando la salud plena de sus individuos.

AR. La pandemia ha supuesto una tendencia al hospitalocentrismo en su globalidad, a la gestión desde arriba, y debemos cambiar a una gestión de abajo arriba, potenciando la atención primaria, la atención comunitaria y los servicios sociosantarios en su conjunto.

P. ¿Qué proyectos han arrancado en este último año?

CS. En nuestra área continuamos con la detección de mujeres mayores en riesgo de soledad y aislamiento social y hemos iniciado unos talleres encaminados a la mejorar la capacitación tecnológica de estas mujeres en su relación con el ámbito sanitario.

AR. Hemos desarrollado un proyecto muy ambicioso, el Practicum Direct: simulador de toma de decisiones en pandemias. También un estudio proactivo de seguimiento de pacientes “Evaluación desde Atención Primaria de la calidad de vida en el contexto de pandemia por COVID-19 mediante EQ-5D-5L”, en el que participaron activamente personal de enfermería y residentes con entrevistas telefónicas a pacientes en la fase de confinamiento. 

P. ¿Alguna novedad en los próximos meses?

CS. Como continuación del proyecto anterior hemos ampliado los talleres a la mejora de la capacitación tecnológica en todos los ámbitos, no solo en el ámbito sanitario, con la colaboración de asociaciones concretas de pacientes.

AR. Ahora estamos a punto de empezar la Unidad Virtual de Pie Diabético, que creemos va a ser un revulsivo en el control del pie diabético en una unidad multiprofesional y utilizando la teleconsulta.

Es un proyecto que nació antes de la pandemia y que hemos tenido que retrasar, estando en la actualidad en una fase previa de formación en centros de sSalud. También estamos desarrollando, todavía en fases muy iniciales, un estudio de investigación sobre la relación entre competencias tecnológicas y edad biológica que esperamos desarrollar a lo largo del próximo año.

P. ¿Con qué herramientas cuentan para desarrollar las políticas de calidad en atención al paciente?

Antonio A. Regueiro.

CS. Contamos con el primer Plan de Salud en el Área como herramienta para producir esos cambios en los próximos cuatro años. Los objetivos de este plan se enmarcan en la ya conocida cuádruple meta de conseguir mejorar la satisfacción de usuarios, de profesionales, con la mayor eficiencia y desde la perspectiva comunitaria. Contemplan además el necesario compromiso de gestores y clínicos en la consecución de estos objetivos.  La experiencia en este primer año has sido ya muy positiva, con mejoras en la organización interna, en la normalización de procesos y en la perspectiva preventiva y comunitaria. Solo por poner unos ejemplos en este año se han llevado a cabo mesas informativas en protección solar, en promoción de ejercicio físico, en detección de tabaquismo y diabetes.

AR. Actualmente estamos volcados con el desarrollo de Planes de Salud Local. Creemos que es un punto de inflexión en la cultura del cambio, incorporando la medida de nuestras actividades al trabajo habitual. Coincido con Coro, en que el impulso y las ganas de la Unidad de Calidad, ha sido estupenda, y nos ha contagiado para continuar en esta línea de mejora continua.

P. ¿Qué papel ocupan los profesionales sanitarios en la calidad asistencial?

CS. Los profesionales son una parte esencial en la provisión de servicios, pero no los únicos. Usuarios, asociaciones sociosanitarias, gestores, políticas de salud… Sin la implicación de todos no pueden producirse cambios de calado.

AR. En el centro del sistema lo ocupa el paciente, pero a continuación están los profesionales. Sin su empeño y dedicación, sin su implicación en la calidad de la atención al paciente, no se conseguirían los objetivos.

P. ¿Cómo trasladan la cultura de la calidad al resto del equipo?

CS. Creando equipo. Dignificando el nivel de atención y la especialidad. Empoderando a sus profesionales. Aumentado su capacidad técnica con formación y acceso a pruebas diagnósticas. Involucrándoles en la toma de decisiones y en el compromiso en los resultados. Además, el impulso desde la Unidad de Calidad para participar y recibir este reconocimiento ha sido clave.

AR. Hay varias claves. Desde luego hacer partícipe a todo el equipo, convencerse de la necesidad de la cultura de la calidad, también introducir las actividades de mejora continua en el trabajo habitual, y por supuesto medir para poder poner en marcha medidas correctoras. La Unidad de Calidad nos ayuda con sus métodos y su forma sistemática para la mejora continua, ya sea en el Practicum, ya sea en la evaluación de las competencias tecnológicas de los pacientes, con el cuestionario Cambados.


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