Después de un año de mucho esfuerzo, trabajo y de mucha incertidumbre, en el que han trabajado en un estado emocional y laboral al límite de sus capacidades, los profesionales del Hospital Universitario de Fuenlabrada han recibido el galardón BiC 2021 que premia al Mejor Servicio de Medicina Interna.
A pesar de haber sido, sin duda, “un año muy especial”, tanto para bien como para mal, la pandemia ha marcado un antes y un después en la forma de entender y vivir la profesión de estos expertos.
En palabras de Sonia Gonzalo Pascual, jefa de servicio en funciones del hospital, “este año los internistas nos hemos hecho más visibles en el hospital. En algunos momentos, todos los pacientes que estaban ingresados en nuestro centro figuraban a nuestro cargo. Algo inaudito y excepcional que nadie había vivido antes, una situación que nos llenaba a todos de perplejidad”.
Aunque la situación “los llenó de perplejidad”, la pandemia ha dejado “grandes aprendizajes” a este servicio de medicina interna. Desde lo profesional, dando una mayor relevancia al trabajo en equipo, hasta lo personal, con un mejor autoconocimiento gracias a esta experiencia compartida.
“Como Servicio hemos salido fortalecidos, creo que nos conocemos mejor, nos respetamos más, hemos compartido una experiencia vital más intensa y de cara al futuro nos sentimos más fuertes para seguir con nuestra actividad y poner en marcha proyectos nuevos”.
Retos, presentes y futuros
Con 18 años de trayectoria, este servicio apuesta por una atención centrada en el paciente y flexible para poder adaptarse a sus necesidades.
“Aunque nuestra mayor actividad sigue estando en la hospitalización convencional, entendemos que es necesario ofrecer alternativas a la misma, eficaces y que mejoren la calidad asistencial y la percepción que de esta tengan los pacientes”.
Asimismo, Gonzalo añade las consultas monográficas con médicos especializados como otra prioridad del servicio, al igual que la puesta en marcha de alternativas a la hospitalización convencional. Este último, explica la experta, se trata de evitar los ingresos hospitalarios y sus potenciales complicaciones para pacientes que ingresen varias veces al año.
“Hemos creado una Unidad donde la atención es más personalizada, más ajustada a sus necesidades, en la que trabajamos juntamente con Enfermería y el Servicio de Farmacia Hospitalaria”, ha recalcado Gonzalo.
Conscientes, además, del retraso en la atención de muchas condiciones patológicas causado por la pandemia, este servicio creó, según ha indicado la experta, una consulta específica de diagnóstico rápido para casos de potencial gravedad.
Por último, Gonzalo ha rememorado cómo la llegada de la COVID-19 creó la necesidad de implantar una consulta multidisciplinar para el seguimiento de pacientes que hubieran sufrido esta enfermedad. Pero lo que el virus ha traído consigo, también se ha quedado. Al igual que lo hizo estas consultas, también lo ha hecho las consultas electrónicas.
“El agradecimiento de nuestros pacientes y de sus familias; y la comprensión y apoyo de las nuestras, es el mejor premio esperable. Pero que, además, sea reconocido socialmente, como por ejemplo lo es con este premio, es muy gratificante y constituye un impulso para seguir adelante con ilusión”.
