GM Madrid | jueves, 23 de agosto de 2018 h |

El Servicio de Farmacia del Gregorio Marañón ha lanzado la app E-OncoSalud, que permite a los pacientes oncológicos estar en contacto con su farmacéutico hospitalario, tener información y consejos sobre su tratamiento y registrar su evolución.

El proyecto ha sido financiado dentro de una convocatoria ‘Fis’ del Instituto de Salud Carlos III. La jefe del Servicio de Farmacia, María Sanjurjo, es la investigadora principal del proyecto.

Los antineoplásicos orales (tratamientos que impiden el desarrollo, crecimiento, o proliferación de células tumorales malignas) han ido tomando cada vez mayor relevancia dentro de la terapéutica en el paciente oncológico. Gracias a estos tratamientos, el paciente se ha convertido en el último responsable de la correcta administración de la medicina, lo que le confiere una mayor autonomía, pero también una mayor responsabilidad.

En este sentido, se debe tener en cuenta que estos medicamentos, aunque exentos de los problemas inherentes a la vía parenteral, se siguen considerando de alto riesgo y además pueden presentar nuevos problemas con su correcta administración, adherencia o interacciones con medicamentos o planta medicinales.

Esta realidad es la que llevó al Servicio de Farmacia del Hospital Gregorio Marañón a la búsqueda de nuevas estrategias para poder mejorar el seguimiento de los pacientes y responder a sus nuevas necesidades. Los profesionales consideraron que las tecnologías de la información y la comunicación, en concreto la salud móvil, podrían suponer una herramienta para dotar a los pacientes de mayor autonomía y posibilidad de comunicación, y a los profesionales sanitarios mejorar el seguimiento y la atención a los pacientes.

E-OncoSalud es una app que recoge toda la información relevante del tratamiento para aumentar la seguridad de los pacientes. Para su diseño se analizaron las características de los pacientes oncológicos, se identificaron sus necesidades y se evaluaron las apps similares que ya existían en el mercado.

Además, en este proceso se contó con la colaboración de oncólogos y hematólogos del centro.

El resultado de este trabajo es el lanzamiento de E-OncoSalud. La app está estructurada en cinco módulos: una Agenda que informa al enfermo a diario de su actividad donde el paciente puede registrar distintos eventos (cita con su médico, analítica, prueba de imagen) con alertas personalizables. También tiene una área de Tratamiento, con los fármacos que toma y su posología, el paciente también puede visualizar el prospecto y programar avisos para su administración y así mejorar la adherencia. Existe un tercer espacio de Evolutivos, para añadir datos del estado general, presión arterial, peso y efectos adversos. El paciente los puede registrar con una periodicidad definida, salvo los efectos adversos, que serán registrados cuando sucedan. El manejo de los efectos adversos está estructurado en base a un algoritmo de decisión que, en función de una serie de preguntas realizadas para clasificar su gravedad, emite distintas recomendaciones.

E-OncoSalud cuenta también con un servicio de mensajería, un canal de comunicación paciente – farmacéutico para contactar a tiempo real. Y por último, el paciente puede acceder a un área de consejos, información general y de los síntomas, enlaces a webs de interés e instrucciones de uso de la aplicación.

Una app que ya ha demostrado su utilidad

El Servicio de Farmacia ya ofrece la app a los pacientes en la consulta de atención farmacéutica en el momento de iniciar el tratamiento con el antineoplásico oral. A día de hoy ya la han utilizado más de 70 pacientes.

Tras los primeros análisis de funcionamiento de E-OncoSalud ya se han obtenido algunos de los resultados significativos. El 72 por ciento de los pacientes ha enviado algún mensaje a través de la app: respecto al tipo de mensaje, el 41,2 pro ciento fueron dudas sobre interacciones, el 22,9 por ciento consultas sobre efectos adversos y el 8,8 por ciento dudas sobre demostración. También, el 58 por ciento de los pacientes notificaron al menos un efecto adverso a través de la app.

Gracias a los mensajes que enviaron los pacientes y al registro de efectos adversos, se ha recomendado, de forma consensuada con su médico, la derivación de seis pacientes a su médico de cabecera, de tres pacientes a urgencias (2 de ellos quedaron ingresados) y se han evitado cuatro asistencias a urgencias. La satisfacción de los pacientes con la app es de 9,7 puntos.