C.S. La Granja (Segovia) | lunes, 19 de septiembre de 2016 h |

Más del 40 por ciento de los ensayos clínicos que se realizan en España están dirigidos a enfermedades sanguíneas y una parte importante se centra en la hematooncología —leucemias, linfomas y mielomas, principalmente—. Un dato que va de la mano de la llegada de “numerosas y destacadas” innovaciones terapéuticas en los próximos años y que permitirán que el curso clínico de patolo gías como en la leucemia aguda mieloblástica (LAM), el mieloma múltiple (MM) o la hemofilia, cambien notablemente.

Este fue uno de los mensajes que se transmitió durante la jornada ‘Algo se está moviendo en el mundo de la hematología’, organizada por la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS). Además, durante el encuentro, se habló de los avances que se esperan para el 58º encuentro anual de la Sociedad Americana de Hematología (ASH), que este año tendrá lugar del 3 al 6 de diciembre en San Diego, California. Sobre esto, habló el vicepresidente segundo de la SEHH y médico adjunto del Servicio de Hematología del Hospital Universitario de Salamanca, Ramón García, quien destacó la llegada de nuevas alternativas para combatir la LAM o fármacos anticoagulantes de manejo más sencillo.

Para empezar, García advirtió de la necesidad de separar entre el laboratorio y la clínica. En primer lugar, destacó el papel que desempeñará el uso de la tecnología CRISPR/Cas9 para editar o corregir el genoma de los pacientes. “Esperamos grandes avances en el próximo congreso con esta tecnología, tanto en enfermedades monogénicas, como en las malignas e incluso esperamos ver alguna aproximación que pueda ser utilizada en terapia génica”, apuntó, haciendo referencia a que no solo se trataría de ver el gen, sino de intentar repararlo.

En este sentido, también habló de las herramientas de secuenciacion de nueva generación (NGS). “Esperamos ver cómo esta se puede aplicar de forma rutinaria en nuestros laboratorios”, agregó. Ya se utiliza para el diagnóstico de coagulopatias y trombopatías, así como LAM, leucemia linfática crónica (LLC), MM, etc., pero queda ver el potencial que tiene para el pronóstico de las mismas.

En cuanto a la clínica, el especialista auguró que la utilización de inmunoterapia para inhibir la vía de PD1 y su ligando arrojará resultados “espectaculares” en linfoma de Hodgkin y que la curacion de la leucemia mieloide crónica (LMC) puede estar cada vez más cerca. Hasta ahora, esta enfermedad se controla con terapia oral, pero lo que ven los expertos, según subraya García, es que quizás se puede llegar a eliminar el tratamiento. “Hay que ver qué pacientes se pueden beneficiar de la opción de suspender el tratamiento y en qué condiciones y, también, qué ocurriría si recae”, indicó.

En el ASH 2016, se hablará de los nuevos tratamientos para la hemofilia —gracias al uso de factores recombinantes de origen biotecnológico se espera que el curso clínico de esta patología cambie— y se presentarán datos de nuevos fármacos monoclonales tanto conjugados, como no.

Otro de los temas que ocuparon gran parte de la jornada y a los que se dedicarán varias ponencias en California, es a la terapia con células CART y a la génica aplicada a estas patologías. Al respecto, Pere Barba, médico adjunto del Servicio de Hematología del Hospital Universitario Vall d’Hebron, centró su ponencia en la inmunoterapia de las hemopatías malignas, haciendo un repaso que abarcó desde los fármacos monoclonales a esta terapia y cómo pueden influir en el abordaje de la LLA.

Lo positivo de estas terapias es, según Berba, que son “muy efectivas y más allá de las complicaciones a corto plazo son seguras”. Si bien es cierto que el experto subrayó que se debe observar cuál es la efectividad a más largo plazo y analizar el factor del coste porque “juega un papel importante en la difusión a gran escala de este tratamiento”.

El presidente de la SEHH, José María Moraleda, reiteró estos mensajes y añadió que, por el momento, se están dando “los pasos iniciales para llevar a cabo estrategias de inmunoterapia antitumoral con una eficacia nunca vista hasta ahora”.

“Se está intentando asegurar la duración de las CART a largo plazo, mejorar la eficiencia de su producción, combinarlas para atacar varios antígenos de superficie de las células malignas al mismo tiempo, combatir las recaídas en las que el antígeno diana inicial es negativo y reducir su toxicidad”, explicó.

Y quien también habló de novedades fue el coordinador del Grupo Español de Mieloma (GEM)—Programa Español de Tratamientos en Hematología (Pethema), Juan José Lahuerta, quien afirmó que en los últimos cinco años se ha avanzado más que en los últimos 40.

El aumento del arsenal terapéutico hace pensar que la posible curación de esta patología pueda estar cada vez más cerca, como señalaron Lahuerta y Moraleda.

Finalmente, respecto a la hemofilia, se remarcó que los afectados por esta enfermedad podrán llevar una vida normal, gracias a la administración de los nuevos fármacos y expresó el deseo de que se consolide la opción del trasplante haploidéntico.