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Realizar el abordaje del sobrepeso y la obesidad a partir de la involucración de las diferentes partes implicadas es la clave del éxito de la metodología Epode, ‘Ensemble Prévenons l’Obesité Des Enfants’ (’Juntos prevenimos al obesidad infantil’), una estrategia que consiguió una reducción del sobrepeso y la obesidad del 9,12 por ciento en un proyecto piloto desarrollado en ocho ciudades francesas entre los años 2005 y 2009, con dos grupos de niños (uno entre cuatro y cinco años y otro entre once y doce años).
Posteriormente, también Bélgica puso en marcha un programa basado en este método, con niños de entre uno y tres años, con el que consiguió una reducción de la prevalencia de sobrepeso y obesidad del 22 por ciento.
Para alcanzar estos objetivos, la metodología Epode se basa en cuatro aspectos fundamentales: el compromiso político ante esta problemática; la obtención de recursos suficientes; la planificación, coordinación y desarrollo de acciones de marketing social y servicios de apoyo a la comunidad; y la utilización de evidencias que sirvan de guías para su desarrollo y evaluación de resultados.
Además, el desarrollo de estas cuatro líneas de actuación se realiza a partir de un enfoque positivo de los hábitos de vida saludables, sin estigmatizar en ningún caso culturas, hábitos de alimentación individuales o comportamientos, y adaptando los mensajes y actividades a los diferentes tipos de población existentes según edad o estatus socioeconómico, entre otras características.
En cuanto al escenario de actuación, los responsables de esta metodología apuntan a la necesidad de incorporar a la comunidad en este objetivo, ya que se ha demostrado que la intervención solo en la escuela no es suficiente.
