La prevalencia de los tumores cerebrales en España es baja. De los dos tipos que existen (primarios y secundarios), los primarios (aquellos que se originan en el propio cerebro) representan un 2 por ciento del total del cáncer en el adulto y hasta casi un 15 por ciento en los niños menores de 15 años, según los datos aportados por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Pero, pese a su baja incidencia (ocho casos por cada 100.000 habitantes al año), la atención a estos pacientes aún tiene retos pendientes.
“El reto más importante es optimizar los recursos y que todos los pacientes tengan acceso a los mejores tratamientos multimodales. Hoy en día no existe en España un reconocimiento de centro de referencia de tumores cerebrales y los pacientes tienen que estar peregrinando entre distintos hospitales que tienen pocas experiencias. En uno le ofrecen la radioterapia, en otro la neurocirugía y en otros ensayos clínicos”, explica a Gaceta Médica Juan Manuel Sepúlveda, coordinador de la Unidad de Neurooncología del Hospital Universitario 12 de Octubre.
Según Sepúlveda, en estos momentos están negociando con el Ministerio de Sanidad para que se cree un CSUR (Centros, Servicios y Unidades de Referencia del Sistema Nacional de Salud) de tumores cerebrales complejos. Sin embargo, se están encontrando resistencias. “Hay hospitales que trabajan muy bien en dar un tratamiento óptimo y multidisciplinar para estos enfermos, pero, sin embargo, no están reconocidos como centros de referencia. Por tanto, no hay forma administrativa de derivar a los pacientes rápidamente a estos hospitales. Queremos que este CSUR siga adelante, pero hay bastantes resistencias y el ministerio no termina de gestionarlo”, añade.
“Queremos que este CSUR siga adelante, pero hay bastantes resistencias y el ministerio no termina de gestionarlo”
Tratamientos más eficaces
El tratamiento que se les administra a los pacientes con tumores cerebrales consiste en una cirugía con o sin radioterapia, radioterapia si no es posible la cirugía, a la vez que también puede estar indicada la quimioterapia (en la mayoría de ocasiones en asociación a las otras formas de tratamiento). “La radioterapia en tumores cerebrales es uno de los tratamientos más eficaces que hay, ya que la quimioterapia es más eficaz en otras partes del organismo que en el cerebro”, afirma Sepúlveda.
En cuanto a las novedades terapéuticas, hace pocas semanas se presentó el estudio positivo en fase III de vorasidenib. Esta molécula pertenece a una nueva clase de fármacos denominados inhibidores de isocitrato deshidrogenasa (IDH), ya que aproximadamente el 40 por ciento de los tumores cerebrales presentan dicha mutación. “Estos inhibidores consiguen frenar la enfermedad durante años y evitar la quimioterapia y radioterapia de entrada en muchos pacientes. Ahora mismo estamos en el momento en el que las autoridades sanitarias tienen que autorizarlo. Esperemos que esté disponible en los próximos meses”, recalca Sepúlveda.
Causa de los tumores cerebrales
La causa que puede dar lugar a su origen se desconoce, aunque hay evidencias de que están provocados por fenómenos aleatorios. “La inmensa mayoría de los tumores cerebrales están causados por el azar, por mutaciones espontáneas de células del cerebro. Las causas directas solo se han visto en un 2-3 por ciento de los casos y son fundamentalmente haber estado expuesto a radiación ionizante durante la infancia y tener antecedentes familiares de enfermedades hereditarias”, afirma Sepúlveda.
Un tumor cerebral puede debutar con crisis epilépticas (convulsiones) o con síntomas generales como la falta de concentración, lentitud de pensamiento, cambios de carácter o comportamiento (denominados cognitivos). Pero también con síntomas secundarios debidos al incremento de la presión intracraneal (dolor de cabeza, vómitos) o con síntomas más relacionados con la localización del tumor, como pueden ser alteraciones en los movimientos o del lenguaje.
