Según el informe ‘Las cifras del cáncer 2023’ elaborado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), el cáncer de pulmón es el tumor que acumula un mayor número de fallecimientos a nivel mundial. Por ello, uno de los focos de los especialistas es mejorar en términos de detección precoz. Sin embargo, esto no es tarea fácil puesto que es una enfermedad que presenta síntomas inespecíficos y, en muchos casos, se diagnostica en fases avanzadas de la enfermedad.
Con el fin de evaluar si la implantación de un cribado en cáncer de pulmón sería coste-efectiva, el Servicio Canario de la Salud junto con la Agencia Gallega para la Gestión del Conocimiento en Salud –a petición del Ministerio de Sanidad– ha elaborado el informe ‘Evaluación del programa de cribado de cáncer de pulmón‘. En este se recoge que actualmente, para realizar este screening, se valora utilizar una la tomografía computarizada con una baja dosis de radiación (TCBD).
Eficacia, seguridad y eficiencia
En este documento, según exponen los autores, se evalúa la eficacia, seguridad y eficiencia de implementar este tipo de programas, revisando los estudios publicados hasta el momento y realizando un análisis de coste-efectividad en el que, según refleja el documento “la mejora en salud que se consigue al cribar a población fumadora y exfumadora con el coste adicional que esto supone, para valorar si establecer un programa de cribado es beneficioso para los pacientes y eficiente, o en otras palabras, si es rentable”.
Yendo al detalle, el documento determina que, aunque reduce ligeramente el riesgo de que las personas fumadoras y exfumadoras mueran por esta enfermedad, no repercute en términos de mortalidad global. Además, señalan que este cribado podría tener efectos adversos, como un alto número de falsos positivos o el sobrediagnóstico en casos que no habrían causado síntomas; esto, puntualizan, podría derivar en pruebas diagnósticas invasivas innecesarias o en tratamientos que no necesarios. Con todo esto, determinan que aunque “el análisis de coste-efectividad concluyó que el programa de cribado con TCBD supone mejoras en salud y también un coste adicional frente a la alternativa de no hacer cribado”, pero que, sin embargo, ”no es una opción rentable para el SNS”.
No obstante, agregan que, según la literatura científica, podría llegar a serlo en población fumadora o exfumadora “especialmente cuando se combine con estrategias de prevención que consistan en programas para dejar de fumar”.
SSCC y pacientes, se desmarcan
A raíz de la publicación de este informe, diversas entidades se han posicionado al respecto. Así, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) ha querido puntualizar diferentes aspectos. Primeramente, aseveran que “la metodología es discutible”, agregando que “existen análisis independientes publicados que discrepan en cuanto al coste beneficio de este cribado en España y son más fieles a la realidad”. Por otra parte, recuerdan que en cáncer de pulmón “la mortalidad sigue ligada a un diagnóstico tardío” y consideran que no se ha tenido en cuenta “el incremento progresivo del precio de los actuales tratamientos disponibles para el cáncer de pulmón”.
Desde SEPAR insisten en que el informe se focaliza más en la parte negativa que en la positiva de los cribados, idea en la que coincide la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM). En concreto, SERAM concreta que “no se tiene en cuenta la reducción de dosis de radiación que supone el uso de las tecnologías y protocolos de exploración actualmente recomendados, ni la drástica reducción de falsos positivos”. Asimismo, afirman que las conclusiones del informe desoyen “las recomendaciones en el entorno europeo”, que abogan por “incluyen ampliar el concepto de cribado de cáncer de pulmón, aprovechando la información que la TCBD aporta, valorando patologías que son detectables y evaluables con esa tecnología y que, por otra parte, se relacionan con el tabaquismo y con el cáncer de pulmón”.
Por otra parte, desde la Lung Ambition Alliance (LAA) -colaboración de diversas organizaciones unidas con la ambición de eliminar el cáncer de pulmón como causa de muerte, en la que participan 15 organizaciones, entre las que se integran también SEPAR y SERAM-, también creen que “la implantación de un programa de cribado en cáncer de pulmón bien orientado y definido es uno de los grandes retos en la detección precoz y prevención de este tipo de cáncer”. Por último recuerdan que es la Unión Europea (UE) quien recomienda que se implemente en todos los Estados Miembros, al igual que el de mama, colorrectal, cuello uterino, próstata y gástrico.
