El doctor Julián Pérez-Villacastín será el presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) durante los próximos dos años. El doctor ha asumido la presidencia de la SEC tras el fin del Congreso SEC21 de la Salud Cardiovascular, que cerró renovando la junta directiva de la sociedad científica.
Trayectoria del nuevo presidente
Pérez-Villacastín es jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, además de director del Instituto Cardiovascular del mismo centro y coordinador de CardioRed en la Comunidad de Madrid. Ejerce también como profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid e investigador principal del CIBER Cardiovascular. Es miembro del Grupo de Expertos para la elaboración de los estándares y recomendaciones de las unidades asistenciales del Área del Corazón del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
El nuevo presidente de la SEC ocupó otros puestos con anterioridad en la organización: fue editor asociado de Revista Española de Cardiología (1995–2001), secretario de la Sección de Electrofisiología y Arritmias (1997–2000), vicesecretario (2007–2009) y secretario general (2009–2011) en el Comité Ejecutivo de la SEC.
Otras nuevas incorporaciones
El nuevo presidente entra en esta ocasión a la Sociedad de la mano del doctor Juan José Gómez Doblas (vicepresidente), de la doctora Marta Farrero Torres (secretaria general) y de la doctora Violeta Sánchez Sánchez (tesorera).
Juan José Gómez Doblas es jefe de la Sección de Cardiología en el Hospital Universitario Virgen de la Victoria y profesor asociado de la Universidad de Málaga.
Por su parte, Marta Farrero es cardióloga especialista en insuficiencia cardiaca y trabaja en el Hospital Clínic. Es profesora de la Universitat de Barcelona, coordinadora de docencia del Instituto Cardiovascular del Hospital Clínic y chair del grupo de insuficiencia cardiaca avanzada de la International Society of Heart and Lung Transplantation.
Violeta Sánchez es cardióloga en las Unidades de Imagen y Valvulopatías del Hospital 12 de octubre de Madrid. Es profesora honorífica de la Universidad Complutense de Madrid e investigadora adscrita al CIBER cardiovascular.
Retos y proyectos del nuevo Comité Ejecutivo de la SEC
- Dar continuidad al programa SEC-Calidad mediante el establecimiento de las Unidades Relativas de Valor (URVs) y Cuadros de Mando. “Este proyecto permitirá que los distintos servicios de cardiología conozcan los costes de su actividad, evalúen su rendimiento y cuenten con una herramienta de gestión que les ayude en la toma de decisiones”, explica el Dr. Pérez-Villacastín.
- Seguir incentivando y promoviendo una investigación cardiovascular de máximo nivel. “Intentaremos impulsar líneas de comunicación y colaboración con CNIC, Instituto Carlos III y otras entidades para fomentar la continuidad entre investigación básica e investigación clínica de calidad”, apunta el presidente.
- Trabajar con el resto de las sociedades científicas para que la SEC tenga un papel importante a la hora de decidir las recertificaciones y las diferentes capacitaciones relacionadas con el ámbito de nuestra especialidad. “Además, vemos imprescindible incrementar la representación de la SEC dentro de la Sociedad Europea de Cardiología y de la cardiología latinoamericana, desarrollando programas específicos para cardiólogos jóvenes”, opina.
- Dar más peso a la SEC en los medios de comunicación para poder transmitir a la población recomendaciones encaminadas a mejorar su salud cardiovascular.
- Dar apoyo científico y de asesoría a un grupo emergente de cardiólogos que desarrollan una actividad privada y necesitan tener habilidades, no solo en aspectos clínicos, sino también en aspectos relacionados con la gestión clínica, las particularidades legales y la gestión empresarial.
- Seguir intentando mejorar la relación con Atención Primaria para poder trabajar en equipo. “Compartimos el mismo paciente en diferentes ámbitos de atención por lo que la salud cardiovascular solo puede abordarse desde la multidisciplinariedad”, opina el presidente SEC.
- Expandir el programa de cooperación internacional, SECoopera. “En solo un año de andadura, este proyecto ya cuenta con más de 90 voluntarios. Ha desarrollado un programa de formación online en cardiología básica, extendido a 12 países de América Latina y a médicos de campos saharauis con más de 800 inscritos, así como un programa de mejora de acceso a medicación cardiovascular en Camerún con la donación de fármacos para 120 pacientes cardiovasculares, lo que supone un año de tratamiento”, explica.
