La contaminación ambiental, la pérdida de biodiversidad y el deterioro de los ecosistemas suponen un riesgo para la salud de los adultos, pero especialmente de niños y adolescentes. Desde la Asociación Española de Pediatría (AEP) celebran el desarrollo del Plan Nacional de Salud y Medioambiente. Sin embargo, “echan de menos” un enfoque dirigido al abordaje de la salud infanto-juvenil.

Por ello, han redactado una carta dirigida a la Vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, donde proponen 3 acciones para contribuir a mejorar las estrategias y las políticas activas de salud y medioambiente. El objetivo de esta carta, además de proponer mejoras, es solicitar una reunión de primer nivel con la ministra. Sin embargo, la reunión se llevará a cabo con el Secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, en las próximas semanas, según ha confirmado en una entrevista con esta publicación el presidente de la AEP, Luis Blesa.

“Los problemas medioambientales afectan sobre todo al niño, al adolescente y a la gestante, motivo por el que este campo que nos incide directamente y es de gran interés para la pediatría”

Luis Blesa, presidente de la AEP

Converger medioambiente y salud, una realidad inevitable

Para poder detallar las propuestas impulsadas por la AEP, Gaceta Médica ha contactado con el coordinador del comité de Salud Medioambiental de la Asociación Española de Pediatría (AEP-CSM), Juan Antonio Ortega García, quien ha explicado cada una de las propuestas redactadas en la carta.

En primer lugar, la asociación, a través de su Comité de Salud Ambiental, considera necesario poder implementar un Plan de Acción de la Infancia/Adolescencia y Medioambiente en España.

“El 70% del presupuesto sanitario se destina al tratamiento y manejo de enfermedades crónicas y la inmensa mayoría se relaciona con exposiciones medioambientales tempranas”

Coordinador del comité de Salud Medioambiental de la Asociación Española de Pediatría (AEP-CSM), Juan Antonio Ortega García

El experto indica que las competencias ministeriales correspondientes a esta materia están distribuidas entre el Ministerio de Sanidad y el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico y que deben “converger” para poder ir en una misma dirección. Por ello, propone empezar por las concejalías y a través de modelos locales para avanzar en este sentido.

Según Ortega, los gastos asumidos hasta el momento impulsan la necesidad de virar hacia un modelo de salud más enfocado en la prevención de riesgos ambientales. “Necesitamos invertir mucho más en disminuir las exposiciones y disminuir el riesgo a enfermedades”, destaca.

Nuevos perfiles de trabajo

El plan contaría con nuevas estructuras, otros perfiles profesionales o la redistribución de recursos. En este sentido, Ortega señala que el Plan podría valorar la inclusión de nuevas capaciedades y perfiles profesionales como matronas ambientales, enfermeros ambientales, terapeutas ambientales, pediatras ambientales o incluso gestores ambientales de los sistemas de salud, entre otros.

“Van a surgir nuevos trabajos y nuevos perfiles de convergencia entre la salud y el medioambiente”, destaca el experto, quien subraya que los niños son especialmente vulnerables y serán los receptores verdaderos de cualquier plan que se establezca a nivel político nacional. En esta línea, insiste en que el embarazo y los primeros 15 años de vida son las etapas con mayor retorno económico y social de la inversión en salud y medioambiente.

En este sentido, defiende que proteger la salud humana y, al mismo tiempo, la salud planetaria es una necesidad “inseparable”.

“Los pediatras podemos liderar esta acción en colaboración con el Ministerio para la creación de ambientes y estilos de vida más saludables que ayuden hacia un nuevo modelo de salud”

Carta dirigida al Gobierno

Esta propuesta también incluye la participación de la sociedad de una forma activa, incluidos los niños. Ortega ha explicado que una de las características de la vulnerabilidad de los niños ante el cambio climático es el hecho de que van a sufrir los efectos y las consecuencias de las medidas instauradas pero, sin embargo, no pueden tomar decisiones al respecto. Por ello, propone integrarlos de forma activa “aunque sea de forma testimonial”.

“Existen muchas asociaciones juveniles, colectivos de jóvenes que están deseando participar y deberían estar más presentes”, subraya. En este contexto, estas medidas servirían para “impulsar la reconexión de los niños y las niñas de este país con la Madre Naturaleza”, señalan en el documento.

La pediatría, conexión “de confianza” con la sociedad

La contaminación de los alimentos, del agua o del aire son algunos de los temas que cada vez preocupan más a la sociedad. En este contexto, los profesionales defienden ser médicos “de confianza” para padres y madres, y también para la sociedad en su conjunto en temas de salud de la infancia. “Las familias cada vez preguntan más acerca de cómo puede afectar el medioambiente a la salud de los niños y los pediatras tenemos que integrar todo lo que sabemos en la práctica clínica”, insiste Ortega.

“Pensamos que dedicar una sección con acciones concretas dirigidas a la infancia contribuiría a robustecer la misión del plan nacional y los resultados”

Coordinador del comité de Salud Medioambiental de la Asociación Española de Pediatría (AEP-CSM), Juan Antonio Ortega García

“Una fotografía de los riesgos y enfermedades ambientalmente relacionadas”

El documento dirigido al ministerio defiende como segundo punto de propuestas poner en marcha el Observatorio Nacional de Salud de la Infancia, Bienestar y Ambiente Marino con sede en un municipio ribereño del Mar Menor con la coordinación/participación activa de la Asociación Española de Pediatría. Esta medida se sostiene en el argumento de que la infancia española está vinculada al mar debido a la gran extensión de zonas costeras existentes. Ortega destaca los altos niveles de contaminación actuales y la importancia de conservar los océanos.

Por último, propone la elaboración de un informe sobre el estado o perfil de la relación entre infancia y medioambiente. El objetivo de este documento sería establecer y planificar estrategias de anticipación, mitigación y prevención del Cambio Climático y la Contaminación en niños y adolescentes. Este perfil permitiría establecer una “fotografía” o un escáner nacional de las enfermedades relacionadas con el medioambiente, como el cáncer infantil o trastornos del neurodesarrollo, para la toma de decisiones políticas.

La Asociación Española de Pediatría ha trabajado durante los últimos años con herramientas que han permitido valorar por zonas contaminantes como metales pesados u otros tóxicos en España.

Juan Antonio Ortega, que acudirá a la reunión con el ministerio prevista para las próximas semanas, tiene claro que una de las ideas que va a trasladar al Secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, es la posibilidad de crear una “red” a nivel nacional.

“Queremos vertebrar, a través del SNS, la posibilidad de que exista al menos una Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica de referencia en cada comunidad autónoma“, concluye Ortega.


También te puede interesar