GM Madrid | viernes, 28 de junio de 2019 h |

La puesta en marcha de consultas propias de enfermería mejoraría de forma sustancial el abordaje integral de los pacientes con artritis reumatoide, según se desprende de las conclusiones del Proyecto SROI-AR, un informe de evaluación del impacto clínico, asistencial, económico y social que tendría el abordaje ideal e integral de esta enfermedad, que afecta a casi 300.000 personas en nuestro país Datos EPISER 2016.

El objetivo de estas consultas, independientes de las consultas médicas, es que los profesionales de enfermería puedan realizar una valoración holística de los pacientes que ya tienen un diagnóstico de artritis reumatoide, realizándoles una serie de pruebas para una correcta monitorización y control estrecho de la evolución de la enfermedad. Así, en caso de que sea necesario, los pacientes podrían ser derivados directamente desde estas consultas al especialista en reumatología.

De esta forma, señala Jenny de la Torre-Aboki, enfermera especialista en reumatología del Hospital General Universitario de Alicante y miembro del comité de expertos que ha participado en la elaboración de las 22 propuestas recogidas en el proyecto, se reduciría de forma importante la carga asistencial de las consultas de reumatología. “De la misma forma que podemos derivar al paciente de forma directa al especialista en caso de que sea necesario, también podemos atenderlo y darle recomendaciones, sin necesidad de que sea atendido por un reumatólogo, si el paciente se mantiene en remisión y está bien”, señala esta experta. Otra de las ventajas de estas consultas es que el paciente puede llamar en cualquier momento en caso de brote o descompensación, gracias a la consulta telefónica.