La Comunidad de Madrid ha alertado de 23 posibles casos de infección por viruela del mono en la región, una infección viral generalmente asociada con los viajes a África Occidental. Esta alerta se ha producido después de que Portugal y Reino Unido hayan confirmado hace pocos días la existencia de varios casos.

El Ministerio de Sanidad ha enviado a una alerta a las Comunidades Autónomas tras la detección de los posibles casos que se encuentran pendientes de confirmación por el Centro Nacional de Microbiología (CNM). Según ha informado la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, las personas en estudio evolucionan positivamente y se encuentran aisladas en sus domicilios, aunque se debe mantener una vigilancia estrecha ya que pueden llegar a requerir ingreso hospitalario.

Desde los propios hospitales madrileños se ha confirmado la actual irrupción de casos. Por ejemplo, desde el Hospital Universitario 12 de Octubre, su jefe de Servicio de Dermatología, Pablo L. Ortiz Romero, confirmaba a través de las redes sociales tres posibles casos registrados está misma mañana del 18 de mayo (a expensas de la confirmación microbiológica).

Primeros casos en Reino Unido

La viruela del mono se trata de una enfermedad endémica y, por lo general, autolimitada leve que se transmite por contacto estrecho. La mayoría de las personas se recuperan en pocas semanas.

Por su parte, la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) ha comunicado que los casos más recientes que se han identificado en el país o se han concentrado en hombres que mantienen sexo con hombres. Asimismo, las autoridades británicas han recomendado a estas personas que estén atentos a cualquier erupción o lesión inusual en cualquier parte del cuerpo, especialmente en los genitales, y a comunicarse con un servicio de salud sexual si presentas dudas sobre su posible contagio.

Los síntomas iniciales de la viruela del mono incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, dolor de espalda, inflamación de los ganglios linfáticos inflamados, escalofríos y agotamiento. Algunos pacientes pueden desarrollar una erupción que a menudo comienza en la cara y que luego se extiende a otras partes del cuerpo, incluidos los genitales. La erupción, que puede confundirse con la varicela o la sífilis, cambia y pasa por diferentes etapas hasta finalmente formar una costra.


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