El periodo de presentación de enmiendas para el proyecto de Ley de Universalidad ha acabado. Uno de los partidos que se encontraba en tierra de nadie (se abstuvo durante la presentación del Real Decreto-Ley de Carmen Montón) es Ciudadanos, quien ha presentado ocho enmiendas. Aunque la justificación que se utiliza es de mejora técnica, lo cierto es que guardan tras de sí una posición ideológica. En primera instancia, la formación naranja defiende modificar el apartado dos del artículo tres del proyecto de ley para que “el derecho a la asistencia sea un derecho por ciudadanía”, según asegura el portavoz de Sanidad, Francisco Igea. De esta forma, piden que se suprima la obligatoriedad de tener la residencia habitual en España.
Otro de los artículos que quiere modificar Ciudadanos es el que hace referencia a la prestación sanitaria a los extranjeros. La formación naranja pide que, al menos, tengan un periodo de tres meses de empadronamiento en España para tener los mismo derechos que los ciudadanos españoles y, mientras tanto, sólo se les atienda en urgencias, a mujeres embarazadas y a menores de 18 años.
Por otro lado, otro de los puntos a los que hace referencia Ciudadanos es a la actualización de la cartera de servicios. La formación pide que se revise, dentro del Consejo Interterritorial, cada seis meses para que puedan incluirse todas aquellas innovaciones coste eficaces que realicen las comunidades autónomas dentro de sus competencias. “Nosotros queremos que la comunidades no pierdan capacidad de innovación pero si esa innovación tiene una evaluación favorable, queremos que se incluya en todo el territorio nacional”, afirma Igea.