¿Cómo se han vivido los momentos más acuciantes de la pandemia de COVID desde la Farmacia Hospitalaria? Para Olga Delgado, presidenta de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), fue una situación “muy crítica”. “No teníamos algunos medicamentos y encontrarte con que te faltan medicamentos básicos y la UCI llena es tremendo”, aseguró durante la “IX Jornada de Salud Pública Online. Aprendizajes en VIH ante la COVID-19“, organizada por la Fundación Gaspar Casal y con el patrocinio de Gilead.

La respuesta de la Farmacia Hospitalaria

Ante esta situación, la farmacia tenía que responder. “Lo primero fue garantizar la disponibilidad de kaletra. Su demanda fue brutal y hubo que reservar para los pacientes que todavía se trataban con lopinavir y ritonavir”, explicó Olga Delgado. Por otro lago, había niños que estaban con la solución oral y “ésta hubo que reservarla para pacientes COVID”. “En aquel momento había demanda de cosas que no tenían sentido y hubo que preservar un poco estos medicamentos para pacientes COVID“, afirmó la presidenta de la SEFH.

Olga Delgado, presidenta de la SEFH, durante la IX Jornada de Salud Pública Online.

Además, la voluntad de la Farmacia Hospitalaria era la de dispensar para más tiempo los tratamientos. “Dar para todo el tiempo en el que era posible compaginándolo con las existencias nacionales”, recalcó Delgado. Sin embargo, no podían hacerlo porque se quedaban sin existencias a nivel nacional. Aún así, intentaron “balancear un poco estas existencias que había con las necesidades de los pacientes para que no tuvieran que venir tantas veces al hospital”.

Otra de las acciones que pusieron en marcha fue el acercamiento del tratamiento al paciente. “Logísticamente y legalmente fue complicado, aunque hubo una normativa que nos lo permitió y ese fue el pistoletazo de salida para que todos los tratamientos salieran del hospital vía farmacia comunitaria o vía directamente a los domicilios”, dijo Delgado.

Equidad y adherencia

La presidenta de la SEFH también hizo mención a la equidad, pues “algunos pacientes demandaban más que otros el envío de tratamiento”. A pesar de ello, enviaron el tratamiento a todos los pacientes, “no solo a los colectivos más vulnerables“. “Queríamos que todos los pacientes tuvieran los mismos derechos en este sentido”, argumentó Olga Delgado.

Además, el envío de la medicación tenía que ir de la mano de una atención farmacéutica al paciente, de un acompañamiento durante su proceso. Por eso, “lo que conseguimos de adherencia en estos pacientes y de cargas viales indetectables no puede dejarse de un día para otro por el envío de la medicación”.

Así, las consultas telefónicas fueron muy importantes para la atención de los pacientes y es algo que Delgado espera que continúe tras la pandemia. “Tener el aliento de los profesionales sanitarios para que continúen con su tratamiento de manera eficaz se debe mantener”, indicó.

Reestructuración del espacio

También fue necesaria una reestructuración del espacio físico. “Las estructuras de atención a los pacientes tuvieron que cambiar. Fue necesario poner mamparas y gel hidroalcohólico, que no teníamos en el hospital y se tenía que hacer en la farmacia comunitaria con alcohol de anatomía patológica”, destacó Delgado.

Pero a medida que la COVID-19 continuaba, los hospitales y los centros sanitarios se fueron adaptando y mejorando. “Se habilitaron espacios para atender a los pacientes de una manera más holgada. Ahora son espacios más protegidos“, apuntó la presidenta de la SEFH.

“A veces el hospital te daba los medios que necesitabas y otras veces no era posible”, defendió Delgado. Y recalcó que, desde la SEFH se colaboró con un fondo solidario con fondos que la industria puso a disposición de los profesionales para lo que fuera necesario. “Y lo que fuera necesario era la solución hidroalcóholica, botes para meterla, mamparas de protección, mascarillas que no teníamos o pantallas protectoras”.


También te puede interesar…