Juan Pablo Ramírez Madrid | viernes, 02 de diciembre de 2016 h |

La reducción de la placa de ateroma gracias al tratamiento con evolocumab (Repatha, de Amgen) ha supuesto un cambio de paradigma en la prevención de enfermedad cardiovascular. Los datos han quedado reflejados en el estudio Glagov, que se presentó recientemente en el Congreso de la Sociedad Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés) y que ponen de manifiesto que la mayor regresión de la placa de ateroma coronario se produce con niveles de colesterol LDL por debajo de los 20 mg/dl.

Los pacientes tratados con una combinación de este inhibidor del PCSK9 y estatinas experimentan una regresión del volumen porcentual del ateroma (PAV) del 0,95 por ciento frente a los que recibieron solo estatinas, que muestran un avance del 0,05 por ciento; es decir, casi un uno por ciento de diferencia. Al mismo tiempo esta disminución es mayor en los pacientes a los que se les ha administrado la terapia combinada, un 64 por ciento, frente al 47 por ciento.

Precisamente los últimos datos publicados en el estudio Glagov y la actualización de las guías de la Sociedad Europea de Cardiología para el tratamiento de las dislipidemias fueron los temas tratados en el Lipid Day, un curso organizado la semana pasada por la Universidad Francisco de Vitoria, que reunió a los cardiólogos de toda España. “Existe una fuerte relación causal entre la reducción de c-LDL, la regresión de la placa atereoesclerótica y una reducción de los eventos cardiovasculares”, explicó Wolfgang Koenig, profesor de Cardiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Ulm e investigador de la Alianza del Corazón de Múnich, durante el encuentro.

Evolocumab ya había demostrado una importante eficacia en la reducción de este tipo de colesterol. El estudio Glagov ha puesto de manifiesto que la combinación de este anticuerpo monoclonal con estatinas ha logrado situar el c-LDL en pacientes con enfermedad coronaria sintomática en 36 mg/dl, frente a los 93 mg de la monoterapia con estatinas. El ensayo clínico tiene una duración de 18 meses. No obstante, Koenig consideró que a más largo plazo los buenos resultados obtenidos hasta ahora podrían ser todavía mejores. Se han producido casos en los que el c-LDL ha descendido a 24 mg/dl. Gracias a este medicamentos los clínicos han conseguido controlar a pacientes con colesterol elevado que no habían respondido a estatinas. Estos avances permiten augurar una mejor prevención de la patología cardiovascular. “Estamos convencidos de que el c-LDL está relacionado con la enfermedad coronaria”, señaló Ulf Landmesser, responsable del Departamento de Cardiología de la Universidad de Berlín. En el primer trimestre de 2017 se conocerán los resultados del estudio Fourier que ha reclutado a más de 27.000 pacientes con el fin de probar si evolocumab reduce la morbimortalidad como los ensayos clínicos presentados hasta ahora parecen apuntar.

“Tenemos una esperanza nueva para pensar en la curación y en la regresión de la enfermedad”, subrayó Koenig.