“Para disminuir el impacto de la COVID-19, las hospitalizaciones y la mortalidad relacionadas, los países deben planificar un despliegue continuo de vacunas contra la COVID en 2023”. Así comienza el último informe del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) sobre consideraciones provisionales de salud pública.
En dicho documento, se explica que los esfuerzos deben centrarse en proteger a los adultos mayores y otros grupos vulnerables, como aquellos con comorbilidades subyacentes y los inmunocomprometidos, independientemente de la edad.
Según los datos de vigilancia del ECDC, con cada nueva ola de infección por COVID-19, es más probable que las personas de los grupos de mayor edad sean hospitalizadas. Los datos sugieren una transmisión persistente del SARS-CoV-2 en los países de la Unión Europea (UE) y, por lo tanto, un riesgo continuo de enfermedad grave para los grupos vulnerables.
Aunque hasta el momento no ha surgido un patrón estacional claro de circulación del virus, los datos muestran que el impacto de la enfermedad ha sido mucho mayor durante el período otoño-invierno.
Programa de vacunación
En este contexto, los modelos matemáticos detallados en el informe indican que se espera que el programa de vacunación de otoño de 2023 dirigida a personas de 60 años o más prevenga hasta el 32 por ciento de las hospitalizaciones relacionadas con la COVID-19 en la UE.
Al realizar el modelo matemático, los expertos del ECDC tuvieron en cuenta el conocimiento recopilado sobre una serie de factores, incluida la disminución de la eficacia de la vacuna, los grupos de edad a los que se dirige la campaña de refuerzo de vacunas de otoño/invierno 2022/23 más reciente, así como la situación epidemiológica de 2022.
En última instancia, las decisiones nacionales sobre las mejores estrategias adecuadas para el contexto epidemiológico local deben ser tomadas por los países, teniendo en cuenta su contexto específico. “Siguen existiendo incertidumbres considerables sobre los futuros desarrollos epidemiológicos y esto puede influir en las decisiones futuras”, especifican los expertos en el informe.
Para terminar, el documento explicativo afirma que para campañas exitosas, las autoridades de salud pública pueden considerar desarrollar actividades de comunicación específicas enfocadas en transmitir y llegar a grupos de alta prioridad a través de canales y mensajeros fiables, y proporcionar información clara sobre qué grupos se recomiendan para la vacunación, el tipo de vacunas disponibles y el momento.
