C. OSSORIO Barcelona | viernes, 03 de enero de 2014 h |

El próximo 12 de febrero se celebrarán comicios en el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona (COMB) para la renovación de los miembros de la asamblea de compromisarios y de la Junta de Gobierno. Tras cuatro años en la presidencia, precedidos de otra legislatura como vicepresidente, Miquel Vilardell no se presenta a la reelección y, aunque considera que el balance deben establecerlo los demás, afirma que se va “satisfecho”tras haber cumplido una etapa “muy difícil”, marcada por la crisis económica.

“Tenemos un sistema de salud excelente que hay que conservar, y he procurado defender la sanidad pública y a los profesionales que lo integran y lo hacen posible”, enfatiza, puntualizando que perdura este reto de defender al sanitario no únicamente en términos económicos o estrictamente laborales, sino en términos de respeto profesional. “En este país tenemos profesionales de primer nivel cuya voz debe ser escuchada”,añade, y en este sentido considera que se está mejorando y “sí que se cuenta con los profesionales en la actualidad con reuniones periódicas”. Así, recuerda que en Cataluña se está elaborando un pacto de mínimos sobre las bases del sistema sanitario público autonómico, en el que han participado organizaciones sindicales y colegiales. Además, subraya que el COMB constituyó el Foro de la Profesión Médica también para recoger esta opinión de los profesionales.

Con todo, Vilardell cree que se debe seguir avanzando en esta línea y aconseja que cualquier cambio organizativo que se realice en una institución se lleve a cabo “de abajo a arriba”, pues a su juicio “los cambios que vienen de arriba hacia abajo fracasan absolutamente todos y crean descontento”.

Durante estos años, uno de sus focos de actuación se ha centrado en el acercamiento del colegio a la atención primaria, un nivel asistencial por el que “hay que seguir luchando” para que sea el gestor de los procesos en el sistema de salud y para potenciar más la figura social del médico de familia.

Por otro lado, la transparencia y la autonomía de gestión son dos conceptos que han protagonizado el discurso del aún presidente del COMB. Y que confía que prevalezcan en la persona que tome el relevo. “Hay que seguir potenciando la autonomía de gestión clínica, pues los médicos y el equipo necesitan tener la certeza de que ellos son los que deciden las acciones a tomar ante un problema clínico”. Otra cosa son los modelos de gestión, que en su opinión no son generalizables y su éxito dependerá de la idiosincrasia de la zona donde se desarrollen. Sólo hay, a su criterio, un ingrediente imprescindible para cualquier modelo, que es la transparencia.

Además de la autonomía en la resolución, Vilardell opina que, ahora que por fin se ha materializado la prescripción enfermera, es necesario “mucho diálogo” para evitar luchas que deshagan la unión en el sector salud y el trabajo interdisciplinar.

En cuanto a la novedad del voto electrónico, Vilardell indica que se va a realizar una prueba piloto para que en el futuro se pueda generalizar. “Si el resultado es positivo y la junta electoral decide aplicarlo, estoy convencido de que en próximas elecciones, con la modificación de los estatutos, se podrá hacer mejor todo el proceso electoral”.