Pediatría/ El Libro Blanco demuestra su eficiencia, pues disminuye costes sanitarios
Las 19 especialidades pediátricas piden ser reconocidas oficialmente en el SNS
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Redacción Barcelona Los profesionales de 19 especialidades pediátricas, incluidos los de atención primaria, llevan casi cuarenta años ejerciendo, pero no están reconocidos de forma oficial en España. Una situación, que no sucede en la mayoría de países de nuestro entorno, está favoreciendo que no se sepa cuántos pediatras son necesarios para atender a la población, que no se pueda garantizar que todos los hospitales —o al menos los grandes— y los centros de salud cuenten con especialistas pediátricos, que no se pueda asegurar una formación homogénea y en todas las comunidades autónomas, y que profesionales de otras disciplinas se “autotitulen” especialistas pediátricos. Desde la Asociación Española de Pediatría (AEP) quieren poner fin a esta circunstancia y reclaman el reconocimiento de todas ellas. Para reforzar su petición, han presentado el Libro Blanco de las Especialidades Pediátricas, “que da cuenta de forma inequívoca sobre la relevancia y el impacto positivo de estas especialidades sobre los resultados de salud en la población infantil”. Además de la publicación del libro, la asociación ha puesto en marcha la campaña de concienciación ‘No es lo mismo’, con el objetivo de dar a conocer los resultados. Como explica el presidente de la AEP, Serafín Málaga, el libro “ofrece datos empíricamente demostrables sobre el papel fundamental del especialista pediátrico en el cuidado del niño”. Una de las principales barreras que han encontrado estas especialidades para su legalización y su establecimiento oficial en los hospitales de referencia es el supuesto incremento en los costes sanitarios. “Esta teoría es completamente falsa y, de hecho, muchos estudios demuestran que cuando los niños son atendidos por pediatras especializados el coste por ingresos hospitalarios y atención en urgencias disminuye de forma significativa”, asegura Antonio Nieto, vicepresidente de la AEP. En este sentido, Nieto añade que “en los años setenta, la mortalidad infantil en nuestro país era cuatro puntos superior que en el Reino Unido, donde, sin embargo, decidieron eliminar la presencia de pediatras en los centros de Atención Primaria. Esta decisión provocó que, en 2008, las tasas de mortalidad dieran un vuelco y la española se situara dos puntos por debajo de la inglesa”. Desde la AEP insisten en que “existen toda clase de opciones legales para facilitar el reconocimiento de estos profesionales, lo único necesario es contar con decisión política”. viernes, 28 de octubre de 2011 h
