El medicamento es un bien esencial para la salud de las personas. Permite curar enfermedades, controlarlas o reducir sus síntomas, dando años a la vida y calidad de vida a los años. Pero cuando caducan o ya no son necesarios, ¿sabemos exactamente qué hacer con ellos para que no dañen a nuestro medio ambiente?

¡Es más fácil de lo que piensas!  Cada vez son más los países europeos que cuentan con sistemas a disposición de los ciudadanos para la recogida y gestión de los residuos de medicamentos. 

Para dar a conocer estos sistemas y promover su utilización se ha puesto en marcha la campaña #medsdisposal, una iniciativa promovida por la Federación Europea de Industrias y Asociaciones Farmacéuticas (EFPIA), la Asociación de la Industria Europea del Autocuidado (AESGP), Medicines for Europe, la Agrupación Farmacéutica Europea (PGEU), la Asociación Europea de Estudiantes de Farmacia (EPSA), la Asociación Europea de Distribución Sanitaria (GIRP) y el Consejo de Dentistas Europeos (CED).

#medsdisposal es una campaña que pretende concienciar a la población sobre la importancia de deshacerse adecuadamente de los medicamentos caducados o no utilizados, reuniendo información sobre los sistemas de gestión que existen actualmente en Europa: https://medsdisposal.eu/

Asimismo, a través de su Web se puede acceder a un conjunto de herramientas de sensibilización y a las acciones que desarrollan algunas organizaciones europeas, como SIGRE, para crear conciencia sobre los riesgos asociados a la eliminación inadecuada de medicamentos.

SIGRE es una de las instituciones que respaldan públicamente esta campaña transnacional, contribuyendo a difundir sus objetivos medioambientales y socio-sanitarios a través de los múltiples canales de comunicación con los que cuenta esta entidad.

Iniciativas como SIGRE, que gestiona de manera eficiente los residuos de medicamentos y sus envases generados en los hogares españoles desde hace más de dos décadas, y #medsdisposal son un claro exponente de responsabilidad y de sostenibilidad ambiental dentro del sector farmacéutico.

Y es que reducir el impacto ambiental de los medicamentos a lo largo de todo su ciclo de vida es una prioridad para las compañías farmacéuticas, como también lo demuestra que la fabricación de medicamentos de uso humano de las más de cien plantas instaladas en España se hace de forma sostenible, con altos estándares en materia de huella medioambiental y uso optimizado de energía y en vanguardia en la denominada economía circular. 


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