El desarrollo sostenible es desde hace años un objetivo social generalizado que sitúa al ciudadano y a su relación con el entorno en el centro del problema, pero también de la solución. La nueva realidad socioeconómica y ambiental exige la creación de alianzas inclusivas entre los gobiernos, el sector privado y la sociedad asentadas sobre principios y objetivos comunes.

La colaboración de todos es esencial, pero especialmente, de todas aquellas organizaciones que desarrollan una actividad con una repercusión directa en el medioambiente por su indudable impacto en la salud del entorno y de la sociedad.

En este sentido, la Agenda 2030 considera prioritario establecer una Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible a través del ODS 17, potenciando acuerdos a todos los niveles, intercambiando conocimientos y experiencias, capaces de transformarse en verdaderas coaliciones para la acción. 

El sector farmacéutico se ha unido en torno a SIGRE, una alianza que apuesta por la salud de las personas y por el cuidado del medio ambiente. A través de una trayectoria de dos décadas basada en la transparencia y la colaboración entre laboratorios farmacéuticos, distribución y farmacias, se ha consolidado un modelo que contribuye al cumplimiento de ocho de los 17 ODS, particularmente aquellos relacionados con el medio ambiente, la salud pública y el bienestar, la acción por el clima y la producción y el consumo sostenible.

La alianza SIGRE contribuye al cumplimiento de ocho de los 17 ODS

La actividad de SIGRE es hoy referente a nivel nacional e internacional por la gestión eficiente de residuos de medicamentos y sus envases.  Esta alianza del sector farmacéutico cierra adecuadamente el ciclo de vida del medicamento en el Punto SIGRE de la farmacia, reduciendo así los perjuicios medioambientales que los restos de medicamentos y sus envases pudieran ocasionar y favoreciendo su no acumulación en los hogares, especialmente los caducados y los no necesarios.  

Así, la alianza eficiente de SIGRE encuentra su reflejo a nivel internacional en la Red Iberoamericana de Programas Posconsumo de Medicamentos (RIPPM), en la que SIGRE actúa como referencia para otros países que estudian incorporar o tienen ya en marcha este tipo de programas para garantizar la correcta gestión medioambiental de los residuos de medicamentos y erradicar su falsificación.

Sin duda, la movilización eficiente de recursos y la constitución de una alianza eficaz es el camino del sector farmacéutico para hacer frente a los retos medioambientales y de la economía circular. En definitiva, con SIGRE el sector farmacéutico muestra su compromiso con el medioambiente, el desarrollo sostenible y la salud de todos.