La educación terapéutica en diabetes ha pasado de ser una necesidad a erigirse en una prioridad y una urgencia. El aumento imparable de casos y la aparición de importantes novedades en el control y manejo de la enfermedad precisa, de esfuerzos formativos en este ámbito, acompañados de las indispensables medidas de equidad y para facilitar el acceso de todas las personas con diabetes a estos nuevos recursos. Sobre estos pilares se asienta este año el Día Mundial de la Diabetes. Este año bajo el lema “Educar para proteger el futuro”, poniendo en valor el papel que desempeña la Enfermería y, sobre todo, la educación diabetológica.

En cuanto a la tecnología, la pandemia COVID-19 aceleró la implementación de la telesalud. Sin embargo, “los recursos que se invierten son insuficientes”, afirma el presidente de la SED, Antonio Pérez. En muchos centros no se suele disponer de los medios necesarios para poder hacer una videoconferencia con el paciente.

Con todo, desde la SED también se reconocen los importantes avances tecnológicos que se han alcanzado en el abordaje de la diabetes. Este año, por ejemplo, se ha aprobado la financiación de los sistemas Flash para personas con diabetes tipo 2 en tratamiento con pauta de insulina bolo-basal.

En esta línea, los expertos Sonia Gaztambide presidenta de la FSED; Antonio Pérez, presidente de la SED; Juan Francisco Perá, presidente de FEDE; Carmen Yoldi, enfermera de práctica avanzada y vocal de la SED y Antonio Lavado, presidente de Fadex han abordado la trascendencia de una buena educación diabetológica en el control de la enfermedad.

Tal y como destaca la Dra. Sonia Gaztambide, presidenta de FSED, está claro que la educación, como parte del tratamiento de la diabetes, cobra cada día más fuerza. Ahora falta que las autoridades en España pongan los medios para ello, con la creación de un perfil de profesionales para educar en diabetes y la posibilidad de tener tiempo para ello, que permita programar y estructurar la educación”.

Educación diabetológica

Asimismo, Carmen Yoldi solicita a las administraciones el reconocimiento del papel de las enfermeras en la educación diabetológica. Por ello, Yoldi pide al SNS la acreditación de educadoras de calidad. “La educación terapéutica la lideran las enfermeras expertas en diabetes. No obstante, algunas enfermeras educadoras en diabetes han llegado a su edad de jubilación o están cerca de lo. Además, la previsión que se hace para cubrir las plazas deja mucho que desear”. Esto supone, que la atención y la educación pueda recaer en profesionales no formados adecuadamente. De esta manera, se impacta directa y negativamente en la calidad de los cuidados y, por consiguiente, en la calidad de vida de los pacientes.

Por su parte, el presidente de la SED ha afirmado que “la educación consiste en acompañar al paciente en su proceso de aprendizaje y ayudarlo a integrar el tratamiento en su vida cotidiana, motivarlo para ello, intentando mantener su calidad de vida”. Aunque, destaca la importancia de programas estructurados adaptándolos a las necesidades de los pacientes.

El presidente de FEDE ha subrayado la importancia de la personalización de la educación.” La educación diabetológica debe ser personalizada continuada en el tiempo y de calidad. Es la clave para conseguir un buen estado de salud y, por ende, de calidad de vida. Además, un paciente que conoce su diabetes es un paciente que pasa desde el autoanálisis al autocontrol de la enfermedad. El paciente pasa de tener una actitud pasiva a activa en el control de la enfermedad. Solo así se pueden prevenir, evitar o retrasar las complicaciones de la enfermedad”.

No obstante, Antonio Lavado ha remarcado las inequidades existentes en la educación. Señala que sólo existe una educación “pautada” en edad pediátrica para la diabetes tipo 1. En cambio, si la enfermedad debuta después de los 18 años no existe ningún tipo de educación, así como sucede con todos los pacientes con diabetes tipo 2. En este tipo no existe ningún tipo de educación diabetológica. Por ello, pide una educación consistente y homogénea para conseguir el mejor control de la enfermedad.

Inequidades en el acceso a la educación

En este sentido, Gaztambide ha aseverado que dependiendo de donde vivas puedes tener mayor o menor acceso a la educación en diabetes. Por su parte, Yolti ha añadido que “el acceso de las personas con diabetes a la educación terapéutica sigue dependiendo del código postal en el que viven con una falta de equidad preocupante”.

En este sentido, Perán ha asegurado que desde FEDE trabajan para reducir esta “brecha”, pero la transferencia de las competencias de Sanidad hace que sigan existiendo diferencias de acceso tanto en tratamientos y material como en el tiempo que transcurre hasta el acceso a los mismos”.


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