El Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) ha presentado las Novedades y Claves en Cáncer de Pulmón 2022. En la sesión diferentes especialistas han revisado los avances que se han producido durante el pasado año.

José Luis González Larriba, vocal del GECP y jefe de Sección de Oncología Médica y jefe de la Unidad de Tumores Torácicos, Urológicos y Melanoma, del Hospital Clínico San Carlos de Madrid da detalle de las conclusiones para GM. Entre los principales logros destaca que los datos consolidan la evidencia del gran avance que se ha producido en la utilización de los Tacs de baja dosis, que permiten identificar lesiones en una fase muy inicial, lo que hace posible operarlas y reducir la mortalidad de estos pacientes.

También ha hecho referencia a los tratamientos específicos, “es fundamental resaltar la importancia del estudio molecular de los tumores. Es decir, que es importante identificar y estudiar los genes que aparecen en los tumores con el fin de ver qué alteración molecular se ha producido y hacer un tratamiento específico dirigido a cada paciente y a cada tipo de tumor. Por tanto, el primer objetivo sería la búsqueda de esas alteraciones moleculares que aparecen en los tumores”, ha señalado González Larriba.

Biopsia líquida

En ese sentido ha explicado que se ha consolidado la biopsia líquida, la identificación de ADN tumoral circulante en la sangre. Gracias a ello se están consolidando los tratamientos dirigidos para estas dianas moleculares, “con lo cual ya no se trata igual el cáncer de pulmón de un paciente que el de otro, a pesar de que sean cáncer de pulmón los dos o del mismo subtipo. Sin embargo, dependiendo de esta alteración molecular, que sí identificamos, cada vez disponemos de más de tratamientos de este tipo”, ha apuntado el vocal del GECP.

Inmunoterapia

Por otra parte, en cuanto al tratamiento oncológico del cáncer el desarrollo y la consolidación de la inmunoterapia “ha supuesto un avance tremendo, de tal forma que podemos pasar de que hace unos 10 años para los pacientes que tenían cáncer de pulmón metástasico, con metástasis a distancia, la expectativa de vida a los 5 años era menor de un 5 por ciento. Y, sin embargo, actualmente pueden vivir hasta 7,8,9 y 10 años más”.

En este ámbito hasta hace apenas dos años sólo podían tratarse algunas de las dianas moleculares, en torno a un 15 o un 20 por ciento de ellas. “En la actualidad, gracias a los estudios con el desarrollo de fármacos nuevos, aproximadamente hay un 50 por ciento de pacientes con un cáncer de pulmón del que identificamos la alteración molecular que se ha producido y existen tratamientos dirigidos frente a esa diana. Un paso enorme”.

Tratamientos adyuvantes y neoadyuvantes

El pasado año también ha sido el de la consolidación de las evidencias que hay sobre el tratamiento adyuvante o neoadyuvante a la cirugía. O bien administrados antes de la cirugía para tumores que están en el límite (localmente avanzados), con el fin de reducirlos para hacerlos operables y mejorar su pronóstico. O decidir si tras la cirugía, en pacientes que tienen un riesgo alto de recaída, se administra una inmunoterapia inmediatamente después de la cirugía complementaria y mejorar el número de pacientes curados. En este sentido, el GECP ya tiene evidencias de que en tumores localmente avanzados la administración de inmunoterapia después del tratamiento estándar también va a aumentar el número de pacientes curados.

Anticuerpos conjugados y anticuerpos bioespecíficos

En este 2023 “se abre una puerta a los tratamientos de los anticuerpos conjugados y los anticuerpos bioespecificos. Se trata de lo que llamamos ADC, una molécula que se crea en laboratorio, a la que va unido un anticuerpo dirigido específicamente contra una proteína que hay en la célula tumoral y a su vez este anticuerpo va sumado a una quimioterapia. Con lo cual llegamos a lo que siempre hemos buscado: la bomba dirigida. Es decir, administramos el tratamiento que tiene un anticuerpo específico que va a actuar solamente frente a las células que tienen un antígeno para el que actúa ese anticuerpo”, ha explicado el jefe de Sección de Oncología Médica y jefe de la Unidad de Tumores Torácicos, Urológicos y Melanoma, del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.

Aunque aún en estudios preliminares, desde el Grupo Español de Cáncer de Pulmón esperan sea el gran avance para poder tratar las diferentes alteraciones moleculares: los anticuerpos conjugados y los anticuerpos bioespecíficos.

“Teniendo en cuenta que el cáncer de pulmón es una enfermedad muy prevalente en el mundo, unos 2 millones de personas lo desarrollan cada año, cualquier mejora por pequeña que sea afecta a muchísimas personas y produce un beneficio importante en valores absolutos”, ha recalcado José Luis González Larriba.


También te puede interesar…