A.L. souza Madrid | viernes, 09 de mayo de 2014 h |

Disparidad, variabilidad e inequidad. Esos fueron los apelativos más nombrados durante la presentación del Informe ‘Jurado Popular: Dilemas en anticoagulación’, que se ha elaborado con la aportación de especialistas, gestores y pacientes. De este modo, una de las cuestiones que se pusieron sobre la mesa fue el hecho de que, a pesar de contar con un Informe de Posicionamiento Terapéutico (IPT) los nuevos anticoagulantes orales (NACOs) no se prescriben en la medida en que deberían. Así lo confirmó el presidente del jurado y jefe del Servicio de Cardiología del Área del Corazón del Complejo Hospitalario de A Coruña, Alfonso Castro Beiras, que señaló que las indicaciones para el uso de estos fármacos que se establecen en el IPT no se están cumpliendo, especialmente en pacientes con mala respuesta al tratamiento clásico, un grupo “prioritario”, según las conclusiones del jurado popular.

El informe, fruto de una jornada de trabajo de la Red La salud del paciente, por delante con la colaboración de Bayer, pone de manifiesto que algunas comunidades tienen establecidos criterios adicionales y heterogéneos en la prescripción de NACOs que podrían desviarse de las recomendaciones aprobadas por el ministerio. En esta idea coincidió Julio Sánchez Fierro, vicepresidente del Consejo Asesor de Sanidad y participante en el jurado popular, que calificó de “preocupante” que resurjan desigualdades para los pacientes después de estar aprobado el IPT.

Para el presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), las pautas que establece el informe de posicionamiento son “perfectamente asumibles por todos porque contemplan a los pacientes prioritarios”. “Ojalá el ministerio de Sanidad convenciese de ello al conjunto de las CC,AA.”, comentó José Ramón González Juanatey.

Por otro lado, para el cardiólogo, no está justificado que haya comunidades autónomas que restrinjan la prescripción de estos fármacos en atención primaria. “Es volver al modelo antiguo en el que el paciente tiene que acudir continuamente al hospital sin ninguna necesidad”, incidió aludiendo a la buena formación con la que cuentan los profesionales del primer nivel asistencial.

Un problema también de profesionales

Se calcula que en la actualidad no acceden a los NACOs “ni el 10 por ciento de los pacientes” que podrían beneficiarse de los mismos, según apuntó Castro Beira. No obstante, éste no es sólo un problema de los gestores sanitarios si no también de los propios profesionales. Una de las conclusiones del jurado popular apunta a que se ha detectado una insuficiente información y formación por parte de médicos, y también de pacientes, para modificar la situación de los pacientes prioritarios. Una tendencia que podría explicarse por una inercia terapéutica que es “necesario modificar”. Por ello se insta a los profesionales a mejorar la identificación y reconocimiento de este grupo para tratamiento con NACOs y a facilitar la utilización de este tratamiento como indicador de calidad de su práctica clínica.

Indicadores y transparencia

Otra de las cuestiones en las que se incide en el documento es en la necesidad de medir. Al respecto, Sánchez Fierro insistió en la necesidad de que el SNS cuente con un cuadro de indicadores de resultados en salud que no estén centrados en el número de actos médicos, si no en resultados, y con una mayor integración y continuidad asistencial en el espacio sociosanitario. Una idea en la que también incidió el presidente de la SEC. Al respecto la sociedad presentará a finales de año su proyecto Incardio, que plantea unos indicadores de salud cuyo objetivo es homogeneizar la asistencia.

Respecto a la posibilidad de que se sigan produciendo ajustes en materia sanitaria, el vicepresidente del comité asesor apuntó a que las pautas de los gestores sanitarios en un momento de crisis no pueden ser las mismas que en un momento de mejora económica, por lo que “debe haber un cambio”.

Por su lado, Alejandro Toledo, presidente de la Alianza General de Pacientes, que también participó en el jurado popular apuntó que “en estos momentos tan difíciles” la Administración debe ser capaz de priorizar los recursos a favor de los pacientes.