Formación/ La EAHP trabaja en un documento de consenso para intentar alcanzar un modelo único válido en cualquier país europeo

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A.C./A.F Madrid | viernes, 24 de mayo de 2013 h |

Dentro de Europa sigue habiendo notables diferencias en relación con las competencias del farmacéutico de hospital. En algunos países, ni tan siquiera se reconoce aún la especialidad. Por ello, la Sociedad Europea de Farmacia Hospitalaria (EAHP) está trabajando en un documento de consenso para intentar alcanzar un modelo único de FH para todo el continente. En opinión de la delegada europea de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), vivir en un mundo sin fronteras es extensible al ámbito sanitario, por lo que el papel del farmacéutico de hospital ante el paciente y la sociedad debe ser el mismo en cualquier país de la UE.

José Luis Poveda, presidente de la SEFH, asegura que el modelo FIR, implantado en toda España en los años 80, convierte a la formación española en “referente para los profesionales del resto de Europa”, ya que en España la FH sí es una especialidad y, además, requisito indispensable a la hora de ejercer la profesión. Sin embargo, son pocos los países de la UE en los que existe como tal, motivo por el cual se celebró la ‘2ª Conferencia Internacional: hacia un modelo único de farmacia hospitalaria en Europa’, patrocinada por Celgene. “España tiene la obligación de liderar el gran cambio que esta especialidad debe dar en Europa. De hecho, los farmacéuticos de hospital españoles somos referentes para los colegas europeos ya que nuestro marco de competencias es de máximo nivel”, remachó Poveda.

Subespecialidades

El paso por delante que lleva España respecto a Europa en el ámbito de la FH se demuestra en el hecho de que las sociedades científicas nacionales puedan centrar ahora sus esfuerzos en que se reconozcan otras subespecialidades ligadas a este nivel asistencial. La puesta en marcha del proyecto de Real Decreto de Troncalidad de Especialidades de Ciencias de la Salud se revela como el guante perfecto que recoger en el intento de alcanzar estos nuevos objetivos.

Y es que este texto podría significar el respaldo normativo para que profesiones como Farmacia Oncológica o Pediátrica sean reconocidas como subespecialidades en el ámbito de la FH.

La puerta de entrada sería la mención existente en este futuro real decreto sobre la posibilidad de crear “áreas de capacitación específica”, algo que, según Benito García, director de Formación de la SEFH, confirma la posibilidad de “constituir subespecialidades dentro de la propia especialidad de Farmacia Hospitalaria”.

A pesar de este primer paso, García se muestra inconformista, ya que manifiesta que “deberían considerarse especialidades independientes y no subespecialidades”. Su petición se sustenta en la consideración que esta futura norma sí ha tenido respecto al reconocimiento y constitución de nuevas especialidades en la rama médica. “Para el ámbito médico, el texto reconoce la especialidad de Urgencias, por lo que sería lógico que se hiciese lo mismo con las subespecialidades que ya existen en los servicios de Farmacia Hospitalaria”, añadió.

¿Qué consecuencias acarrearía el reconocimiento oficial de especialidades como Farmacia Oncológica y Farmacia Pediátrica? En primer lugar, según recuerda este experto, “una formación más concreta y reglada” para aquellos profesionales que apostasen por estas áreas, las cuales “exigen conocimientos profundos en la materia”. De forma paralela, este reconocimiento facilitaría el acceso de los profesionales que se hayan formado en estas materias a los servicios de Farmacia de los hospitales.

FH y Primaria

Más suerte tuvieron quienes trabajan en AP ya que, por primera vez, la Medicina de Familia contará con reconocidos especialistas en Farmacia cuyo periodo de formación específica será de cuatro años, “muy superior” al que tienen en estos momentos. Así lo aseguró Poveda, en referencia a este proyecto de real decreto en el que se integra junto a la FH bajo la denominación ‘especialidad de Farmacia Hospitalaria y Atención Primaria’.

En este sentido, Poveda explicó a GM que hasta ahora, los farmacéuticos que trabajan en AP no tenían reconocida su especialidad, por lo que, a su juicio, la Medicina de Familia se verá “claramente beneficiada” con la aparición de una formación reglada que “garantizará la calidad” de la labor de todos los profesionales.

Este tema fue abordado durante la jornada ‘Farmacia Hospitalaria y Atención Primaria’, en la que se puso de manifiesto que desde la FH se considera “una oportunidad” esta ampliación de las competencias del farmacéutico de hospital con una orientación hacia Primaria, especialmente teniendo en cuenta los cambios que se están produciendo tanto en los hospitales como en el perfil de los pacientes. La modificación mantendrá la estructura hospitalaria, pero intentando responder a la situación actual del paciente y del sistema sanitario con este nuevo perfil que se ha venido desarrollando durante los últimos años. Además, el propio decreto “indica claramente” que la FH tiene, por su formación, la capacidad demostrada para resolver los problemas relacionados con AP por lo que, en adelante, ampliarán las competencias y mejorarán la formación.

Piden respaldo normativo para facetas profesionales no reconocidas legalmente

La Medicina de Familia se verá claramente beneficiada de la formación reglada

Entre los proyectos comunes europeos que se han puesto en marcha para implantar un modelo único europeo está el programa Pharmine. Surge de la necesidad de adaptarse a la Declaración de Bolonia y a la Directiva de la UE 2005/36/EC sobre reconocimiento de cualificaciones profesionales, que determinan la movilidad de los estudiantes de Farmacia y de los profesionales farmacéuticos. Se trata de homogeneizar la formación del grado de farmacéutico y de sus respectivas especialidades.

En el ámbito de la FH este proyecto sirve para sentar las bases de las competencias mínimas que definen esta profesión en el marco europeo y, sobre todo, para justificar y establecer la necesidad de una especialización posgrado para el desempeño de las mismas.

Asimismo, a día de hoy existen varios grupos de trabajo en el seno de la Sociedad Europa de Farmacia Hospitalaria que están trabajando en definir la situación profesional en distintas áreas de actividad: relación con el entorno, sistemas de medida de la actividad, identificar centros de excelencia, coordinación con la actividad de la Federación Internacional Farmacéutica y mejora de los sistemas de comunicación, todo ello con el objetivo de definir el marco de competencias profesionales del farmacéutico en Europa.