El Foro de la Profesión Médica (FPME) ha rechazado la propuesta del Ministerio de Sanidad de eliminar la nota de corte a los residentes. Consideran que no resuelve el problema de las vacantes que afrontan algunas especialidades en los MIR. Así, repercutirá en el prestigio de la profesión y ahondará en los problemas que está sufriendo la Atención Primaria. Por todo ello, han pedido poner el foco en la mejora de las condiciones laborales que sufren los profesionales, lo que provocará que las especialidades más afectadas sean “más atractivas” para los jóvenes profesionales.

El secretario general del FPME, Víctor Pedrera, ha señalado que la retirada de la nota de corte parte de la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria por las vacantes que han quedado desiertas en las últimas convocatorias. En un desayuno informativo celebrado en la sede de la Organización Médica Colegial de España (OMC), ha destacado, junto con otros miembros del Foro, que “la raíz de los problemas está en las condiciones laborales en esta especialidad que ha sido denostada”. Así, estos profesionales “han mantenido una sobrecarga asistencial infame, cargas burocráticas bestiales y una dependencia total de la atención hospitalaria”, entre otras razones. Por tanto, ha ahondado en su “falta de atractivo” a los residentes.

Registro de profesionales

El presidente de la Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina (CNFDM), Pablo Lara, ha reclamado un registro de profesionales a las administraciones. La inexistencia de estos datos “genera desconocimiento” a la hora de planificar le número de plazas que deberían cubrirse en las convocatorias de MIR. El secretario de la OMC, José María Rodríguez Vicente, ha indicado que “necesitamos datos que debemos aportar entre todos”, en alusión a los profesionales y las sociedades científicas.

“Tenemos que promover el cumplimiento de la ley que obliga a los colegiados a actualizar sus títulos”, según ha explicado en referencia a los problemas respecto al Registro de Profesionales del Ministerio de Sanidad y de la propia OMC. En cuanto a cifras, ha añadido que faltan unos 60.000 profesionales por registrar sus especialidades en los colegios. Por ello, ha destacado “la importancia de contar con datos precisos para poder planificar la demografía médica en España”, ha apuntado. Algo que también ha confirmado el presidente de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), Miguel Lázaro, en relación a la situación del “exilio de médicos”.

Líneas de actuación para el nuevo curso

Las principales líneas de actuación para el nuevo curso que comenzará en septiembre serán la estabilidad laboral y la situación de Atención Primaria, la salud de los médicos y estudiantes y la sobrecarga laboral, la demografía médica, los programas formativos, la recertificación, el continuo formativo o la relación médico paciente. Así, el presidente de la OMC y del Foro, Tomás Cobo, ha explicado varios ejes de acción del Foro. “La defensa de la profesión médica desde el Grado de Medicina, la formación médica especializada, la formación médica continuada y la investigación”. Además, ha puesto en valor la unión de la profesión y la condición de “consejeros gratuitos” para todas aquellas cuestiones que puedan necesitar las administraciones e incidía en que el trabajo seguirá dirigiéndose a promover la defensa de un “modelo sanitario universal, público y gratuito”. 

Por su parte, Pedrera ha expuesto que las condiciones laborales en España distan mucho de las del resto de países de la Unión Europea. Este es uno de los factores que han propiciado la fuga de médicos al exterior y a la medicina privada. “Seguimos con retribuciones muy por debajo de las de los países de nuestro entorno, doblando y triplicando en algunos casos la retribución percibida. Las condiciones laborales en España, especialmente en lo que se refiere a la sobrecarga laboral, alejan a las nuevas generaciones de Atención Primaria y de las llamadas áreas de difícil cobertura, donde se combina la alta presión asistencial por plantillas infradotadas con a falta de recursos que hacen poco o nada atractivos estos puestos de trabajo”, ha denunciado. 

Guardias médicas y estrés laboral

Pedrera también ha criticado el sistema de guardias médicas. Ello se debe a que se ha mantenido sin cambios importantes durante los últimos 50 años, con la hora de guardia retribuida por debajo de la ordinaria, sin contabilizar para la jubilación. Esto impide la conciliación personal, perpetuando una “situación anacrónica”. De hecho, “tenemos un problema serio y es hora de enfrentarlo abordando las causas, de sobra conocidas, y reclamando medidas”, ha abundado.

En cuanto a la salud mental y el estrés laboral, Lázaro ha indicado la situación de estrés laboral crónico que sufren los profesionales. De este modo, ha insistido en la necesidad de proteger la salud laboral de los médicos, responsabilidad que recae en las administraciones. “La sobrecarga de trabajo hace que se desborde el control y la autonomía del médico, situación que se une a la falta de retribución, acoso laboral o la violencia contra los sanitarios”, entre otros. “El estrés crónico impacta en trastornos mentales y físicos”, según ha replicado. Algo que se ha agravado por los efectos de la pandemia. Por ello, ha insistido en los efectos del ‘burnout’ en los profesionales, un punto de acción clave para el Foro.

Formación y demografía médica

El presidente de Facme, Javier García Alegría, ha abundado en la necesidad de renovar las comisiones de la especialidad y actualizar los programas formativos obsoletos. En concreto, ha subrayado la urgencia de desarrollar la Directiva Europea 2013/55 sobre el reconocimiento de cualificaciones profesionales y mejorar la planificación de recursos humanos en el ámbito sanitario. También ha destacado la importancia de adaptar las convocatorias MIR a las necesidades reales de cada especialidad para evitar que las plazas queden sin cubrir.

Asimismo, el presidente de la CNFDM, ha destacado el problema de la demografía médica desde las facultades. Así, ha indicado el aumento del 94 por ciento en el número de plazas de Medicina en los últimos 15 años. En concreto se ha pasado de 28 a 50 facultades en este periodo. Así, este incremento no ha solucionado los problemas de la profesión ni las dificultades de contratación de profesionales, pero puede afectar la calidad de la docencia, según ha recordado. Por este motivo, Lara ha solicitado que se proporcione a los futuros médicos la mejor formación posible. De esta forma, ha destacado la importancia de la alianza entre facultades y tutores clínicos.

Atención al estudiantado y relación médico-paciente

La presidenta del Consejo de Estudiantes de Medicina (CEEM), Laura Cortés, ha presentado el proyecto DABE -depresión, ansiedad, burnout y empatía-. Así, ha revelado en estos tres primeros niveles, un alto nivel entre el estudiantado de medicina. De hecho, ha advertido de preocupantes tasas de ideación suicida y autolesión. Por este motivo, ha propuesto la modificación de la formación médica para prevenir el deterioro mental de los futuros profesionales. También, mejorar los servicios de apoyo psicológico en universidades. Además, ha enfatizado en que la salud mental de los profesionales sanitarios es crucial para el cuidado de la población.

Por último, impulsor de la candidatura de la relación médico paciente como Patrimonio Inmaterial de la Unesco, Patricio Martínez, ha redundado en la importancia de la relación médico-paciente como núcleo fundamental de todo acto médico. Así, ha incidido en que esta relación ha evolucionado con el tiempo, por ejemplo con la modalidad actualidad de la telemedicina. El Foro de la Profesión aprobó en 2016 salvaguardar esta relación, formando una candidatura a la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. La intención del Foro es seguir trabajando para que este proyecto logre esta declaración.


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