Durante la jornada del martes 2 de julio, en el marco de los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid, se llevó a cabo un evento destacado en el que participaron importantes colaboradores como Moderna y Humans. El tema central de la jornada fue “Divulgar en salud: claves y retos para una comunicación efectiva”. Este curso subrayó la importancia crucial de una comunicación eficaz en el ámbito sanitario.

Interdependencia entre salud y comunicación

Juan Carlos Gil, director general de Moderna para España y Portugal, destacó la interdependencia entre salud y comunicación al señalar que “hay que trabajar en la salud y en la comunicación, ya que la una no puede vivir sin la otra, ambas son indispensables”. Su intervención puso de relieve cómo una comunicación efectiva es vital para la difusión de conocimientos sanitarios y para la concienciación de la sociedad en políticas de sanitarias.

Francisco José García, delegado de la Decana para Innovación y la Transformación Digital y el Emprendimiento, y coordinador del Centro de Especialidades del Hospital Clínico San Carlos, presentó una conferencia titulada “Dominando la comunicación efectiva: claves para conectar con tu audiencia”. En su ponencia, abordó temas como la evolución de la comunicación a lo largo del tiempo, los retos y responsabilidades actuales en la comunicación sanitaria, las características de las generaciones digitales y su manera de interactuar, la influencia de la inteligencia artificial en la comunicación efectiva, así como los proyectos en desarrollo y las estrategias digitales más exitosas.

Salud y sanidad pública

La primera mesa redonda contó con la participación de Marta Molina Olivas, subdirectora general de Prevención y Promoción de la Salud de la Comunidad de Madrid, y Jorge del Diego Salas, director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de Andalucía. Salas enfatizó que la salud pública sigue siendo una gran desconocida para gran parte de la población y subrayó la necesidad de que se de una correcta educación sanitaria. Por su parte, Molina aclaró que la salud pública no es sinónimo de sanidad pública y tampoco se contrapone a la privada, afirmando que “la salud pública es la disciplina en la que el paciente es la población, además, es una especialidad sanitaria multidisciplinar que se guía por los principios de medicina basada en la evidencia y de un ciclo continuo de mejora de la calidad”.

En la segunda mesa redonda, diversas profesionales del sector de la comunicación y Santiago de Quiroga, presidente y consejero delegado de Wecare-u, debatieron dos preguntas fundamentales: ¿qué están haciendo los medios de comunicación en salud para llegar a la población? y ¿qué estrategias han sido más efectivas para llegar a la población? Los ponentes coincidieron en la importancia de utilizar un lenguaje adecuado, conocer bien al público objetivo y seleccionar cuidadosamente las fuentes de información. Quiroga destacó que, para un medio especializado, el proceso de selección de la información es crucial debido a la gran cantidad de datos disponibles en el sector sanitario. “El reto en nuestro caso es la cantidad de información que hay de todo el sector, nuestras fuentes están todas autorizadas”, afirmó.

Redes sociales y comunicación sanitaria

Además, se dedicó un tiempo considerable a discutir la importancia fundamental de las redes sociales en la comunicación sanitaria moderna. Los ponentes resaltaron cómo estas plataformas digitales se han convertido en herramientas indispensables para llegar a un público más amplio y diverso. Explicaron que las redes sociales permiten a las instituciones sanitarias, profesionales de la salud y comunicadores especializados compartir información de manera rápida y eficaz, llegando a personas de diferentes edades, ubicaciones geográficas y antecedentes culturales.

El evento concluyó con un consenso general sobre la necesidad de mejorar la comunicación en salud, aprovechando las nuevas tecnologías y estrategias digitales para alcanzar una mayor efectividad y resonancia entre la población. Los participantes acordaron que la combinación de conocimientos sanitarios y habilidades comunicativas es esencial para enfrentar los desafíos actuales y futuros en el ámbito de la salud pública.


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