SEMG pide que Madrid mantenga abiertos los centros de salud

La Comunidad anuncia el cierre de más de medio centenar de centros de salud y reorganiza la atención primaria

717
Dra. Isabel Jimeno, presidenta de SEMG Madrid
Dra. Isabel Jimeno, presidenta de SEMG Madrid.

La Sociedad Madrileña de Médicos Generales y de Familia (SEMG Madrid) ha cuestionado la gestión de la crisis generada por la pandemia del Covid-19 en los centros de atención primaria de la Comunidad de Madrid.

La Comunidad publica en su web un listado de centros de atención primaria que a partir de hoy dejarán de prestar atención presencial en la región, o al menos restringen parte de su horario, cuyos pacientes serán derivados a otros centros. En total, más de medio centenar de centros de un total de 430 dispositivos con los que se cuenta en la región.

Además, desde el pasado 22 de marzo han dejado de funcionar temporalmente los Servicios de Urgencias de Atención Primaria, que abren por las noches y los fines de semana. Para atender las emergencias y las urgencias por la noche, Sanidad recuerda que el SUMMA 112 cuenta con 28 UVI móviles operativas, 38 Unidades de Atención Domiciliaria y la flota de ambulancias urgentes, en torno al centenar.

Ante estas decisiones, la sociedad científica madrileña reclama un cambio de orientación de la estrategia de abordaje de la pandemia de COVID 19, comenzando por mantener abiertos los centros de salud.

Equipos de protección

También reclaman la dotación de equipos de protección adecuados a todos los profesionales y que se permita que desde el primer nivel de atención pueda realizarse el diagnóstico y el abordaje terapéutico, que también se ha visto limitado por la escasez de fármacos en toda España, pero solo para la atención Primaria

Su presidenta, Isabel Jimeno, califica como lamentable el Plan de Agrupación de estos centros. SEMG Madrid considera que el diseño de la actuación de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid en la pandemia del coronavirus, centrada en una visión hospitalaria de la patología, “es un claro error que estamos pagando todos los madrileños”.

Según su opinión, esta visión hospitalocentrista ha llevado a olvidar la necesaria actuación de la Salud Pública y la Atención Primaria en el abordaje de una pandemia.

Enfoque comunitario

Además, subrayan se ha obviado el imprescindible planteamiento comunitario en el abordaje de la prevención de la enfermedad y remarcan que se ha centrado solo en la actuación curativa.

Entre las críticas, también destacan que se ha primado la actividad de las urgencias y de los hospitales; se ha prohibido el diagnóstico precoz, la detección de focos de infección y el abordaje de las complicaciones de forma temprana.

Uno de los puntos críticos es que se ha impedido la realización de test diagnósticos en atención primaria y se ha limitado también que desde los centros de salud se soliciten pruebas radiológicas y se efectúen derivaciones al segundo nivel, lo que sin duda ha generado una mayor atracción de los ciudadanos hacia los hospitales, a los que identifican como los puntos de primera oleada, argumentan.

Capacidad de diagnóstico

Además, cuestionan que no solo se ha limitado la capacidad de diagnóstico, sino que, tras dar instrucciones para que en los centros de salud se realicen diagnósticos exclusivamente clínicos, los datos así generados (estimados en más de 200.000 madrileños con sospecha de padecer la enfermedad) se ignoran.

De este modo, remarcan que en este momento se contabilizan únicamente los pacientes con test diagnóstico positivo, “lo que sin duda induce todavía a más errores en la planificación del abordaje y en la estimación de la mortalidad y de las repercusiones sociales y del contagio”.

SEMG Madrid añade que esta limitación de la capacidad diagnóstica está generando dudas en los madrileños: “No entienden que no se les realice la prueba diagnóstica si no se acude al hospital o a centros privados, lo que provoca una vez más una mayor afluencia a estos”.

La sociedad científica insiste en que el hecho de minusvalorar la atención primaria ha llevado a que no exista un circuito eficaz para la realización de test diagnósticos a los profesionales.

Plantillas mermadas

De hecho, remarcan que hay demoras de más de una semana en la recepción de los resultados. Lo que está dando lugar, tal y como observan los profesionales, a la ausencia de sus puestos de trabajo de un número importante de profesionales con test negativo, que entre tanto han dejado de atender a la población.

Si no se ausentan, por otra parte, se facilita la transmisión de la infección por parte de los propios sanitarios.

Los médicos de primaria no conciben las alternativas planteadas a los hospitales. Cuestionan, por ejemplo, que dada la saturación inducida en los hospitales, se pongan en marcha centros de descarga de los mismos: hoteles hospitalizados y el macrohospital de campaña de IFEMA.

“Estos centros de descarga, en vez de intentar disminuir el acceso a los hospitales y permitir aliviar a los mismos, se llenan de pacientes que pasan previamente por otros hospitales; al trasladarse desde estos, no solo se convierten en focos de difusión de la enfermedad, sino que estimulan la asistencia a los hospitales de otros ciudadanos, lo que contribuye de nuevo al peligroso efecto llamada”, critican.

Tampoco ven con buenos ojos que ante el tamaño del hospital de campaña y la necesidad de personal sanitario y no sanitario, se decida retirar profesionales de atención primaria, “lo que conlleva ignorar la actividad que realizan al filtrar el acceso a los hospitales y diagnosticar y tratar sintomáticamente a los pacientes”.

En la misma línea, subrayan que al disminuirse la actividad que está realizando la atención primaria, “que nuestras autoridades tan poco valoran”, se potencia con toda seguridad la segunda oleada de pacientes a los hospitales. En su opinión, se trata de algo difícil de corregir y que colaborará a incrementar el bloqueo de los mismos y la disminución progresiva de la capacidad de atención sanitaria adecuada a los madrileños.

Ante esta situación, SEMG Madrid agradece el sacrificio de los profesionales de atención primaria, “que afrontan la atención de pacientes sin la protección necesaria, con equipos de protección individual escasos y que no reúnen las condiciones mínimas de seguridad”, concluyen.


También te puede interesar: