Cinco semanas después de la Declaración del Estado de Alarma por la pandemia de coronavirus, la atención primaria ha entrado por fin en el discurso político del gobierno. La Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), con su presidente a la cabeza, Antonio Fernández Pro, celebra esta novedad, pero también exige medios que les permitan desarrollar la función que les corresponde.
La sociedad científica recuerda que desde el principio ha defendido el papel que tendría que haberle correspondido al primer nivel asistencial desde un abordaje comunitario y de contención de esta crisis sanitaria, aunque sea ahora cuando les trasladen la responsabilidad de indicar el proceso de desescalada en cada comunidad autónoma.
Acceso a pruebas diagnósticas
Desde SEMG remarcan que para detectar y conocer la realidad no solo basta con anunciarlo: “es necesario que de “de una vez por todas la atención primaria disponga de las herramientas adecuadas y tenga acceso pruebas diagnósticas para poder hacerlo”, tal y como citan en su manifiesto.
En este sentido, denuncian que ese material “ha estado ausente y sigue ausente en la mayoría de los centros asistenciales, principalmente, los tan anunciados test masivos de detección, que desde que se prometieron podrían haber permitido aislar ya desde el primer nivel los posibles casos, evitando de este modo la propagación de los contagios con tanta rapidez”.
Sin medidas de protección adecuada
Además, remarcan que a día de hoy el personal de los centros de salud sigue aún sin disponer de los medios de protección adecuados, no solo en consulta, sino en la atención domiciliaria, “lo que ha provocado que ellos mismos hayan enfermado y, sin saberlo, hayan contagiado a sus propios pacientes”. “De seguir así -advierten- los casos de infectados por COVID-19 no solo no se estabilizarán, sino que seguirán en aumento”.
La sociedad científica subraya el esfuerzo de los médicos de familia por adaptar su trabajo a la nueva situación sin desatender a sus pacientes. No obstante, lamentan que la falta de presencia en el discurso político pueda dar la impresión equivocada que el personal estaba de manos cruzadas.
La mayoría de profesionales fallecidos, de atención primaria
Anuncios como los realizados durante el fin de semana pasan por alto, desde su perspectiva, todo lo que el primer nivel lleva haciendo hasta ahora, “en la mayor parte de los casos sin recursos ni protección, a pesar de contar con pruebas tan evidentes, como que la mayoría de los profesionales fallecidos por esta nueva enfermedad están siendo médicos de familia”.
Para finalizar, SEMG pide un mayor reconocimiento de la AP en el abordaje de esta crisis y mayor potección y recursos para que los profesionales puedan desarrollar su trabajo en las condiciones adecuadas.