La Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc) arranca su XLII Congreso en Sevilla con la petición de una Ley General de Atención Primaria. Así lo ha reclamado esta mañana su presidenta, María Fernández, en la presentación del encuentro, que tendrá lugar hasta el dos de julio.

Fernández ha subrayado que esta ley debe girar en torno a ejes esenciales para la sociedad científica como son la universalidad, la gratuidad en el momento de la prestación, la accesibilidad de todos los ciudadanos y la capacidad resolutiva. También ha de sustentarse, según ha destacado, en la eficiencia y la sostenibilidad del nivel asistencial, las mejoras organizativas, el desarrollo de una cartera de servicios y el blindaje de la financiación.

“Todo esto no se puede conseguir si no contamos con una gestión de la sanidad independiente de la ideología. Por eso solicitamos esta ley que la hagan suya todos los partidos políticos, una ley que salga de un pacto de estado”, ha reivindicado la portavoz de Semfyc.

“Quiero una atención primaria en la que los discursos políticos se trasladen a los hechos y al presupuesto”

María Fernández (Semfyc)

Fernández ha expresado también su preocupación por el hecho de que a partir del documento de reforma y mejora de la atención primaria aprobado en diciembre muchas comunidades estén llevando a cabo planes dirigidos al cierre de los puntos de atención primaria.

Asimismo, ha hecho hincapié en que la primaria mejora la atención hospitalaria, porque resuelve la mayoría de los problemas de salud de la gente, y ha destacado que tiene funciones distintas.

Un catálogo óptimo, no de mínimos

La propuesta de esta nueva normativa incorpora asuntos como el catálogo de prestaciones y servicios. En este sentido, la presidenta de Semfyc ha remarcado que “los ciudadanos merecen un catálogo de prestaciones y servicios óptimo, y no un catálogo de mínimos”.

Esta cartera, ideada por la sociedad científica, debería incluir mecanismos de mejora de la gestión del paciente complejo crónico con multimorbilidad, prácticas de conciliación, medicalización y de prescripción, o tecnologías como la ecografía en cada consulta del primer nivel, entre otros.

Blindaje presupuestario

De cara a la financiación del primer nivel, Fernández remarca que la nueva ley debería hacer posible un blindaje presupuestario. Según sus cálculos, el presupuesto sanitario debe incrementarse hasta alcanzar un 10 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 7,5 por ciento registrado en 2020. De ese diez por ciento, además, la inversión en primaria debe ascender hasta el 25 por ciento, mientras en 2020 fue solo del 14,3 por ciento, según ha repasado la presidenta de Semfyc.

Fernández ha recordado también que en los próximos cinco años se jubilarán el 33 por ciento de los médicos de familia que trabajan en el primer nivel asistencial, lo que supone la jubilación de 12.000 profesionales, y ha hecho referencia al plan de inversión remitido por la sociedad científica al ministerio de Sanidad en el que solicitaban, entre otros puntos, la creación de 7.000 plazas profesionales de especialistas en medicina de familia y la creación de equipos de atención primaria multidisciplinares, entre otros puntos.

En la misma línea, la presidenta de Semfyc ha reivindicado una atención primaria en la que los discursos políticos se trasladen a los hechos y al presupuesto.

Vacantes MIR

La presentación de este congreso coincide en el tiempo con el último día de plazo para que los extracomunitarios que participaron en la convocatoria extraordinaria de plazas MIR tomen posesión de sus plazas. En los próximos días se conocerá la suma total de plazas de medicina de familia que no se han completado este año. De entrada, en la segunda convocatoria extraordinaria quedaron sin cubrir un total de 93 plazas, a las que hay que sumar las renuncias que se lleven a cabo en los procedimientos de toma de posesión, que el año pasado dejaron sin cubrir un total de 60 plazas.

A la espera de conocer estos datos, Semfyc ofrece su propia fórmula para lograr que la medicina de familia recupere su atractivo, que pasa, según destaca su presidenta, por potenciar el peso de la especialidad en el ámbito académico, hacer frente a la precariedad de los contratos MIR e incorporar medidas de conciliación e incentivos en el entorno rural, entre otras muchas ideas.

“Desde las sociedades podemos insuflar entusiasmo desde la facultad a los estudiantes, a los residentes y a los especialistas”

Pilar Terceño (Samfyc)

En la misma línea, y poniendo el foco en el margen de maniobra de las sociedades científicas en este sentido, la presidenta de la Sociedad Andaluza de Medicina Familiar y Comunitaria (Samfyc), Pilar Terceño, admite que la mejora de los sueldos de los médicos, y de las condiciones no están en nuestras manos, pero sí se puede hacer algo: “Insuflar entusiasmo desde la facultad a los estudiantes, a los residentes y a los especialistas. Hacer la vida laboral lo más agradable y prestigiosa posible”.

“Que se puedan sentir orgullosos del trabajo. Ahí podemos hacer mucho con congresos como este, donde la comunicación, la formación, etc. resulte estimulante, con ideas nuevas y proyectos que se puedan trasladar al día a día en la consulta. Eso está en nuestra mano”, advierte.

En este sentido, José Luis Hernández, coordinador del Comité Científico del congreso, insiste en llevar a cabo una planificación completa que vaya más allá. “Si no hay más personas que quieran hacer medicina de familia, no tiene sentido que se pongan en marcha más plazas”, destaca.

Ida y vuelta en el viaje de la medicina de familia

El lema escogido este año por la Semfyc para su congreso, que reúne desde 30 al 2 de julio a los médicos de familia en Sevilla, está inspirado en el quinto centenario de la vuelta al mundo de Magallanes.

“Como ellos, nos enfrentamos a retos del día a día y a nuevas circunstancias”, detalla Isabel León, coordinadora del Comité organizador del Congreso.

José Luis Hernández detalla que esta propuesta de viaje se refleja en el programa de bolsillo a modo de mapa, con tres rutas principales:

  • Nuevas rutas. “Hacemos las cosas, pero queremos que en este nuevo viaje se lleve nueva formas de hacer las cosas”, explica.
  • Expedición virtual y salud digital. Parte de la idea de que los viajes ya no se hacen igual. “El uso de la tecnología es un aliado, no queremos dejar a un lado lo presencial, pero hay que adquirir nuevas habilidades y conocimientos en su uso”, detalla.
  • Travesía compartida. Una ruta con la que remarcan que los médicos de familia no están solos, de ahí que el congreso esté abierto a la participación de otros profesionales como psicólogos, farmacéuticos, otorrinolaringólogos o psiquiatras, sin olvidar la conferencia inaugural de una matemática.