El currículum de formación en atención primaria de la Confederación Europea de Pediatras de Atención Primaria (Ecpcp), elaborado por el grupo español de este órgano, ha sido presentado a jefes de servicio de hospitales en España como el Hospital de Cruces, el de Toledo y algunos en la Comunidad de Madrid para que empiece a ser implantado. Además, en Europa lo están adoptando ya algunos países como Hungría, Alemania y Chipre, además de Israel, que también pertenece a la Ecpcp.
Asimismo, la Asociación Española de Pediatría lo tradujo al español, lo que ha permitido que los países del cono sur de Latinoamérica lo hayan aplicado ya y que Brasil tenga intención de traducirlo al portugués.
El grupo español envió también el currículum a la Comisión Nacional de Pediatría y está actualmente determinando si lo considera útil para la especialidad.
Así lo explicó a GM Carmen Villaizán, vicepresidenta de formación de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (Aepap) y representante de la Ecpcp.
Asimismo, este currículum de formación en AP fue presentado recientemente en el marco de la reunión del Global Pediatric Educational Consortium (GPEC), celebrada en Barcelona, al haberse inspirado el grupo español en el que el GPEC realizó hace dos años.
Centrado en competencias
Tal y como señaló Villaizán, el programaestá basado en competencias, por lo que “no es un acúmulo no selectivo de conocimientos que se van añadiendo a lo largo de los años”. Por eso, todos los capítulos cuentan con un apartado de conocimientos, otro de habilidades y un tercero de actitudes y comportamientos (las tres partes de las que se compone una competencia).
Se trata de un programa que es útil tanto para el médico que ya es pediatra, con el objetivo de promover la autorreflexión en relación con todo lo que necesitas en el día a día de su consulta, como para el residente de pediatría, que tiene que rotar tres meses por atención primaria, por lo que podría aprovechar esta información durante ese periodo.
Sus elaboradores quisieron también que fuese flexible para que su formato se adaptase a todos los países europeos “aunque se requiriese de alguna pequeña modificación”, algo que se ha empezado ya a llevar a la práctica y que está previsto que en los próximos meses se amplíe a otros países.
Capítulos
El currículum está dividido en dos grandes capítulos: el primero reúne y desarrolla las competencias específicas en AP y el segundo recoge aquellas que son generales de la pediatría pero que en su uso en el primer nivel asistencial tienen unas características específicas distintas a las del hospital.
Las competencias específicas se dividen en cuatro apartados, el primero es la medicina preventiva y comunitaria; el segundo, el desarrollo, que a su vez se divide en el crecimiento, el desarrollo, la nutrición, la conducta y la salud mental, los trastornos del lenguaje, el aprendizaje, los trastornos sensoriales y el funcionamiento psicosocial; otro apartado amplio es el dedicado a la adolescencia y en él están incluidos medicina del adolescente y abuso de sustancias; y el último de ellos aborda el maltrato e incluye maltrato infantil y negligencia.
El segundo capítulo recoge todas las áreas de la pediatría centradas en el órgano (cardiología, alergología, dermatología, etc.), urgencias en pediatría de AP, toxicología, cuidados neonatales, cuidados paliativos, medicina del deporte y farmacología.
En lo que respecta a las competencias compartidas, Villaizán dejó claro que el pediatra de atención primaria es el responsable de sospechar las patologías antes de derivar a los niños al hospital, así como de hacer un seguimiento posterior de las enfermedades y las repercusiones que tiene tanto para el propio menor como para sus padres, el resto de hermanos o su influencia al acudir al colegio.