La trombosis asociada a cáncer es un evento frecuente que está adquiriendo una relevancia de primera magnitud en la práctica clínica en los Servicios de Oncología Médica españoles, con un impacto importante en la morbimortalidad. El aumento de su incidencia se debe a factores como la mayor supervivencia de los pacientes con cáncer, mejores técnicas diagnósticas y más precisas, el aumento del uso de fármacos asociados a trombosis y la mayor concienciación de esta complicación por parte de los profesionales sanitarios. Además, recientemente se ha mejorado notablemente el conocimiento y el manejo de esta enfermedad a través de múltiples ensayos clínicos y proyectos de investigación, junto con la introducción de la medicina personalizada que facilitará estrategias de prevención que eviten la aparición de este tipo de eventos en los pacientes con cáncer.
Con motivo del Día Mundial de la Trombosis que se celebra el viernes, 13 de octubre, la Sociedad Española de Enfermería Oncológica (SEEO) y la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) anuncian que están trabajando de forma conjunta en identificar áreas de mejora en la atención en la enfermedad oncológica, la administración de tratamientos y sus posibles complicaciones, y se están abordando cuestiones relativas al diagnóstico, profilaxis, tratamiento, y situaciones clínicas que requieren una especial formación como es la trombosis asociada a cáncer.
“La identificación de los diferentes factores de riesgo implicados en el desarrollo de la trombosis asociada a cáncer es esencial para desarrollar estrategias de prevención adecuadas y garantizar un correcto diagnóstico y tratamiento. La puesta en marcha de estas acciones es crucial para aumentar la supervivencia y prevenir complicaciones a largo plazo que puedan mermar la calidad de vida de los pacientes oncológicos”, explica Andrés Muñoz, coordinador de la Sección SEOM de Trombosis y Cáncer y oncólogo médico del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, quien añade que “una de las medidas más importantes es la concienciación tanto del personal sanitario como de la sociedad de la notable relevancia e impacto de la trombosis venosa asociada a cáncer hoy en día. Una adecuada formación puede permitir un reconocimiento temprano de síntomas y signos, y eventualmente realizar un diagnóstico precoz”.
De ahí la necesidad de proyectos de educación, formación y divulgación para conseguir un óptimo manejo de los pacientes con cáncer, intentando proporcionar mayor conocimiento al personal sanitario que trabaja en los Servicios de Oncología Médica. En este contexto y con esta filosofía, SEEO y SEOM han puesto en marcha el I Curso de Formación en Trombosis asociada a cáncer, que dará comienzo el próximo 29 de enero de 2024. El plazo de preinscripción al curso se abrirá el próximo 20 de noviembre y se cerrará el 8 de enero.
“A lo largo de las últimas décadas hemos sido testigos de numerosos estudios en pacientes oncológicos con esta condición, por lo que se han aprobado nuevos tratamientos y su uso en diferentes situaciones. El correcto conocimiento de los fármacos indicados para cada situación, así como sus dosis e instrucciones de administración, forma parte de los conocimientos básicos que todo personal de Enfermería debe adquirir para proporcionar unos adecuados cuidados al paciente”, explica Brozos.
“El precoz reconocimiento del cuadro clínico de presentación y el uso de tratamientos anticoagulantes que se utilizan en pacientes oncológicos, así como un adecuado manejo de la trombosis asociada a catéteres, nos parece de crucial importancia para el desarrollo de este curso, cuyo objetivo principal es mejorar la asistencia en pacientes que presentan esta complicación”, indica Gutiérrez. “A día de hoy existen guías clínicas de manejo de esta situación, quedando no obstante algunas cuestiones todavía sin resolver, haciendo que el manejo de la trombosis suponga un reto clínico al que debemos enfrentarnos en nuestra práctica clínica habitual”, insiste Muñoz.