Investigadores del Idiap Jordi Gol han validado la adaptación al castellano del test Brief Physical Activity Assessment Tool que, con solo dos preguntas, determina si una persona es suficientemente o insuficientemente activa.
Carlos Martín, investigador principal del Grupo Estilos de Vida del Idiap, comentó a GM que saber si una persona es o no sedentaria es “muy importante” para el facultativo de AP y, además, gracias a esta herramienta se puede saber “con cierta certeza”. Sin embargo, los test disponibles hasta el momento eran “muy largos” y suponían para el facultativo bastantes minutos de consulta, o bien era necesario utilizar para ello algún dispositivo, que no todo el mundo tiene la posibilidad de disponer del mismo.
Sin embargo, con este nuevo cuestionario, con solo dos preguntas que se contestan en muy poco tiempo, es posible discriminar entre la persona que es sedentaria y la que es activa, y tiene la ventaja de que se puede realizar en las consultas o incluso la misma persona se puede automedir.
En el estudio que se ha realizado con el fin de validar esta prueba se han incluido 1.184 personas de 20 a 80 años, captadas a partir del proyecto nacional de investigación multicéntrico Evident, en el que se han medido diferentes variables demográficas y de estado de salud en seis centros de investigación (Salamanca, Barcelona, Cuenca, Vizcaya, Valladolid y Zaragoza).
Se ha medido la actividad física global para determinar la cantidad que realizaba cada persona, se les realizó el test breve de actividad física en la versión castellana, el test 7 Días, y se les entregó un acelerómetro para medir durante siete días esta actividad. Una vez recogidos todos los datos, se calculó el porcentaje de coincidencia de los diferentes resultados obtenidos en las distintas pruebas.
El cuestionario de actividad física breve muestra buenas correlaciones con el test 7 Días y con el acelerómetro en todos los grupos de edad y sexo. Se considera que un 58,7 por ciento de las personas que participaron eran insuficientemente activas frente a un 41,3 por ciento suficientemente activo.
Tras este estudio, los investigadores concluyeron que el test breve de actividad física es una herramienta válida para calcular estos parámetros.
Martín incidió en que una de sus propuestas es que se incluya dentro de la historia clínica electrónica de los pacientes y, de hecho, ya han enviado estos datos al Instituto Catalán de la Salud que está valorándolo. “Tenemos la impresión de que se incluirá, porque es muy breve, muy fácil de hacer y va a tener buena acogida entre los profesionales ya que no les supone un esfuerzo muy grande”, aseguró para añadir que también sería conveniente que esté a disposición de la población general para que pueda autoevaluarse cuando así lo desee.
