Inmunizar al personal sanitario frente a la COVID-19 es una tarea en la que las administraciones ya se encuentran inmersas. Con la emergencia provocada por el rápido crecimiento de casos de la tercera ola, los profesionales ya comienzan a reclamar mayor velocidad para así garantizar su papel ante un futuro escenario de presión hospitalaria. Así lo ha reclamada el sindicato de enfermería Satse, quien ha advertido de la preocupante evolución de la pandemia en España.
Tal y como apuntan, se prevé un incremento de la tensión y sobrecarga en el conjunto de los centros sanitarios y sociosanitarios del país. En este sentido, reflejan la absoluta necesidad de contar con el mayor número posible de profesionales sanitarios.
Una mayor seguridad para los trabajadores que beneficiaría, en consecuencia, la atención y cuidados de las personas afectadas por la enfermedad, así como al resto que sufran otras patologías, con las mayores garantías de eficacia, seguridad y agilidad.
“No podemos permitir que ningún sanitario contraiga la enfermedad por falta de diligencia de las distintas administraciones a la hora de vacunarles con urgencia”, han recalcado desde la organización sindical.
De esta manera, Satse ha insistido en que las consejerías de Sanidad deben optimizar y agilizar sus respectivas estrategias de vacunación. Además, han argumentado que la inmunización de este colectivo resulta más fácil a nivel logístico y organizativo.
Evitar la sobrecarga
Según han defendido, la tercera ola de la pandemia es una realidad. Por ello, han reseñado la la necesidad de posibilitar prioritariamente la vacunación de los profesionales “que volverán a afrontar situaciones muy duras y difíciles“.
Asimismo, el sindicato ha recordado que toda baja de un profesional sanitario motivada por haber contraído la enfermedad supone, además de un grave perjuicio y riesgo severo para su salud, una mayor sobrecarga laboral para sus compañeros y compañeras y una peor atención y cuidados a los pacientes.
