El 82,5  por ciento de los pacientes y el 85,5 por ciento de los cuidadores prefieren tomar una dosis única de anticoagulante oral de acción directa (ACOD). Unos datos que contrastan con los datos de utilización de estos tratamientos que avanzan que tan solo el 42,8 por ciento es tratado con estos medicamentos. Así lo recoge el artículo ‘Preferencias de tratamiento como base para la toma de decisiones en pacientes que toman anticoagulantes orales directos en España’, publicado en la edición digital de Journal of Thrombosis and Thrombolysis.

Olga Gavín, del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza y vocal de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia (SETH), es la primera firmante de este trabajo.

Características

En el estudio, la mayoría de los pacientes tenía edad avanzada, baja actividad física, y presentaba comorbilidades. A su vez eran pacientes polimedicados. De cada diez candidatos encuestados, ocho dijeron que preferían tomar una dosis única de ACOD con agua. Tanto pacientes como cuidadores identificaron la frecuencia de la administración o posología como la segunda prioridad del tratamiento, después del riesgo de hemorragia mayor y menor. En tercer lugar, los encuestados señalaron las interacciones farmacológicas.

“Cuando hay diferentes opciones disponibles de acuerdo con los criterios clínicos, las preferencias de tratamiento deben evaluarse mediante una simple pregunta que se realizará en la práctica clínica habitual”, indican los autores del artículo.

Preferencia en los ACOD

El objetivo de este proyecto ha sido identificar perfiles de pacientes vinculados a preferencia en la administración de anticoagulantes orales de acción directa. Para ello, se diseñó en España un estudio observacional, transversal y multicéntrico. El estudio incluyó pacientes adultos (y/o cuidadores), diagnosticados con fibrilación auricular y tratados con un ACOD durante ≥6 meses de acuerdo con la práctica clínica habitual, capaces de completar el cuestionario del estudio y no participar en un ensayo clínico.

Los pacientes y cuidadores se clasificaron según sus preferencias de tratamiento. En el grupo A se incluyeron los que preferían dosis única diaria con agua. En el grupo B estaban los que votaban por la dosis diaria única con alimentos, mientras que en el grupo C se registraron las personas que preferían tomar la medicación dos veces al día.

Ante esta situación, los autores de este trabajo advierten de que “las preferencias de tratamiento debe evaluarse mediante una simple pregunta que se realizará en la práctica clínica habitual”.

Pacientes con comorbilidades

En total, se incluyeron 332 pacientes y 55 cuidadores. Se mostraron perfiles sociodemográficos y clínicos similares entre los grupos de estudio. La media de los pacientes era de 73,7 años, con un 51,2 por ciento de hombres. El 80,7 por ciento de las personas seleccionadas tenía comorbilidades asociadas y tomaba una media de 6,6 fármacos al día. La media de edad de los cuidadores era de 58,7 años, de los que el 69,1 por ciento eran mujeres y el 52,7 por ciento trabajaba de forma activa.