C. Rodríguez Madrid | martes, 05 de noviembre de 2019 h |

Siguiendo los compromisos establecidos en el Pacto del Botánico, una de las guías del Gobierno valenciano en los últimos años ha sido la recuperación de derechos, especialmente en la lucha contra la pobreza farmacológica. Esta filosofía se mantiene de cara a los presupuestos sanitarios para 2020. “Hemos blindado el programa de farmacia con 1.239 millones de euros, un 18,3 por ciento del presupuesto” sanitario, ha asegurado la consejera de Sanidad Universal y Salud Pública, Ana Barceló, durante su comparecencia en las Cortes regionales para explicar el proyecto de cuentas públicas de su departamento.

Más aún, el gobierno valenciano cree que ha llegado la hora de dar un “salto cualitativo”, y por ello dentro de este programa aumenta considerablemente la adquisición de prótesis y ortopedia. Este aumento irá de la mano de otra de las grandes apuestas de la Consejería: la puesta en marcha del Plan de Reducción de la Demora, dotado con 35 millones de euros, de los cuales 21 millones irán destinados a intervenciones quirúrgicas con recursos propios y 14 millones a un plan de choque.

En total, las cuentas valencianas prevén destinar cada día a Sanidad más de 18,5 millones de euros: un total de 6.765 millones que representan el 40 por ciento del total de la Generalitat. Dentro de ellos, los programas de perfil asistencial, tal y como ha resaltado Barceló, tienen una dotación global de 5.037 millones de euros, lo que representa el 74 por ciento del total del presupuesto sanitario.

Otras de las políticas prioritarias en los presupuestos sanitarios valencianos son la Salud Pública (50 millones, con un incremento del 7,2 por ciento); los recursos humanos (2020 será un año clave en esta materia, puesto que la Consejería ya está trabajando en la mayor Oferta Pública de Empleo publicada hasta el momento) o la inversión en I+D.

Según Barceló, el fortalecimiento de la investigación es la única vía para conseguir renovar las estrategias necesarias para hacer frente a los retos que plantean patologías como las enfermedades neurodegenerativas, las enfermedades raras o el cáncer. La apuesta del Gobierno valenciano con la I+D biomédica se concreta en 27,4 millones de euros, un incremento superior a un 20 por ciento. Además de ello, Barceló ha recordado que ya se ha creado un equipo de trabajo encargado de elaborar el nuevo estatuto que permita estabilizar al personal investigador.