J.V. Madrid | viernes, 08 de marzo de 2019 h |

En 2017 se produjeron en nuestro país alrededor de 330.000 fracturas por fragilidad, con un coste sanitario de 4.200 millones de euros. Las previsiones indican que el coste crecerá más de un 30 por ciento en 2030 y podría alcanzar los 5.500 millones. Este problema de salud pública creciente, afecta actualmente a una de cada tres mujeres y a uno de cada cinco hombres en España y tiende al alza debido al envejecimiento de la población y al aumento de la esperanza de vida.

Para analizar este tema desde todas las perspectivas se ha celebrado el encuentro de redacción ‘La fractura ósea en la mujer. Prevención y abordaje asistencial’, promovido por GACETA MÉDICA y UCB.

Una de las principales conclusiones que ha salido a relucir es que la fractura por fragilidad está infradiagnosticada y, además, infratratada.

“Claramente, la primera traba es que la fractura no se considera un problema. Hay una falta de contextualización”, destacó Pablo Talavera, responsable médico de Salud Ósea de UCB Iberia, quien afirmó que “la osteoporosis y las fracturas por fragilidad no se le pueden escapar al médico. No puede ser que llegue un paciente con una fractura, que de síntomas y no sea derivado a otro especialista. Trabajando todos juntos podemos solucionarlo”.

La aplicación de nuevas medidas preventivas y de diagnóstico clínico precoz podría evitar cerca de 700.000 fracturas. Aunque existen protocolos para ello, no han sido implantados

“Hay que abarcar a toda la población que presente un alto riesgo de fractura. Sin embargo, actualmente “hay pacientes que no se valoran hasta que no van por la cuarta fractura. Por lo que hay que convencer a las administraciones que hay que agrupar a esta población. La identificación es el primer paso primordial y luego ya implantaremos los protocolos”, confirmaba María Jesús Moro-Álvarez, vicepresidenta de la Sociedad Española de Investigación Ósea y del Metabolismo Mineral (Seiomm).

Asimismo, los expertos han denunciado que en ninguna otra patología el paciente sale del hospital sin tratamiento, mientras que este caso “solo un 26 por ciento de los pacientes con fractura de cadera sale con un tratamiento. Hay que incorporar estos protocolos a las estrategias de salud”, añadió Talavera.

Según Moro-Alvárez, esto se debe a factores como que las fracturas de cadera se resuelven, por ejemplo, en el servicio de cirugía y no hay un servicio clínico detrás o un adecuado abordaje multidisciplinar.

Avance lento

Los especialistas reconocen la necesidad urgente de identificar este problema como una prioridad de salud pública y establecer estrategias de prevención, divulgación e información.

Desde el punto de vista de los pacientes, una de las claves es que existe una gran disparidad incluso entre los centros.

“No es la misma atención que se da en unos hospitales o en otros. Existe una disparidad muy grande entre hospitales ya que en algunos centros hay profesionales más concienciados y sensibilizados que en otros”, defendió Mª Antonia Robles Palacios, presidenta de la Asociación Española con la Osteoporosis y la Artrosis (Aecosar). Asimismo, denunció que las listas de espera son muy largas. “No puede ser que la gente espere tres meses con un dolor tan agudo y con una calidad de vida tan mala. Vemos que va todo muy lento y muy por debajo de las necesidades de los pacientes. Necesitamos otra respuesta”. También, subrayó que, por ejemplo, “los pacientes salen con mucho miedo a caerse tras el alta y no todo el mundo tiene dinero para irse a lo privado o pagar una residencia”.

Por su parte, la vicepresidenta de Seiomm subrayó que están trabajando en varias vertientes más allá de lo meramente asistencial.

“Trabajamos en nuevas medidas diagnósticas y de tratamiento” pero hay que hacerlo también en el ámbito social, para que el paciente esté informado. “Tiene que conocer la enfermedad y la asistencia sanitaria que se presta”, añadió Moro-Álvarez, quien también incidió en que “las instituciones avanzan muy lentamente en comparación con otras áreas médicas, como la diabetes, aunque los costes sean muy altos”.

Información y formación

Los participantes en el encuentro de redacción han insistido en que falta divulgación sobre osteoporosis y la fractura por fragilidad. En comparación con otras patologías, las campañas o los talleres de información resultan bastante escasos.

“Hay un problema de divulgación de los medios. Así como hay documentales sobre el corazón, no hay documentales sobre estos temas. Nadie sabe de qué está hecho el hueso. La gente piensa que solo tiene calcio”, lamentaba la vicepresidenta de Seiomm.

De hecho, se remarcó que hay personas que pierden calcio y no se dan cuenta. “Hay que hacer entender a la gente que no se ha fracturado porque se hayan caído, sino porque su hueso es débil y la caída ha sido el detonante”, matizaba el representante de UCB.

“Nosotros no tenemos ningún estudio que diga si los pacientes están bien o mal informados. Tienen información en función de si los profesionales de los centros están más o menos implicados”, continuó la presidenta de Aecosar. “Aportamos todo lo que podemos. Tenemos una colaboración con Semergen para hacerles llegar las preguntas médicas, ya que los pacientes diagnosticados tienen poca información y, mucha menos los que no están diagnosticados”, añadió.

La representante de los pacientes reclamó más campañas de concienciación y educación sobre la enfermedad. “Lo mismo que con otras patologías se han hecho campañas, hay que dar visibilidad a la osteoporosis. El problema es que como no duele parece que no tiene importancia, pero claro que la tiene. Hay que dar una orientación preventiva a los pacientes para que se cuiden. Si sabes que te has fracturado y los especialistas no te han hecho nada pero ves un mensaje en televisión, seguramente buscarás información”, subrayó Robles.

Iniciativas

Mayor concienciación, formación y divulgación son algunos de los pilares establecidos por los expertos para mejorar el abordaje de esta patología.

“Como vamos tan lentos, todo es útil”, destacó Moro-Álvarez, quien también aseguró que el avance será más rápido “en la medida que la población tenga más conocimiento y las administraciones estén más concienciadas y haya más investigación en tratamiento”. En cualquier caso, remarcó que lo más urgente es “identificar la fractura, con nombre y apellidos, tanto por parte del paciente como el profesional”.

“Los pacientes se tienen que unir a las asociaciones para que participen más y que se visibilice más. Nosotros hemos hecho campañas en los centros de mayores de la Comunidad de Madrid pero hay que hacer más para recordarlo. Ahora con los sistemas nuevos y las redes sociales se puede llegar a más población”, enfatizo la presidenta de Aecosar.

Por su parte, Pablo Talavera resumió las iniciativas necesarias en tres líneas.

“Por un lado, formación e información a profesionales y pacientes. Además, hay que plantear un manejo asistencial visto globalmente, desde el diagnóstico a medidas farmacológicas y no farmacológicas y con seguimiento con unidades multidisciplinares” y finalmente “se necesita un plan estratégico de salud”.

Unidades de Fractura

Por su parte, Santiago Palacios, presidente de la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas (Fhoemo) ha hablado con GACETA MÉDICA para aportar su opinión sobre el trabajo multidisciplinar en esta patología.

“Debe mejorar. Ya existen en algunos grandes hospitales unidades multidisciplinarias de coordinación de fracturas, llamadas FLS (Fracture LiasonService) que tienen por objetivo, entre otros, evitar una nueva fractura”, acentuó el especialista que también reclama que todos los profesionales “que estamos relacionados con la osteoporosis, y por lo tanto con las fracturas osteoporóticas, deberíamos ser una unidad de coordinación de fracturas andante. Detectar a una paciente con fractura osteoporótica y saberla tratar adecuadamente, disminuirá en gran medida, el riesgo de volver a tener otra fractura”, añadió. Sin embargo, el presidente de Fhoemo aclaró que el problema de los dos millones y medio de personas en España con osteoporosis no se va a resolver “con unas cuantas unidades. Necesitamos la concienciación de todo el personal de atención primaria. Existen ya protocolos claros de actuación, por lo tanto, llevémoslo a la práctica”, concluyó.


Balance
En 2017 se produjeron unas 330.000 fracturas por fragilidad con un coste de 4.200 millones de euros



Futuro
Las previsiones indican que el coste crecerá más de un 30 por ciento en 2030, y podría alcanzar los 5.500 millones



Prevalencia
La osteoporosis afecta actualmente a una de cada tres mujeres y a uno de cada cinco hombre en España



Tratamiento
Solo un 26 por ciento de los pacientes con fractura de cadera sale del hospital con tratamiento



Mª Jesús Moro-Álvarez
Vicepresidenta de la Seiomm
“Es necesario abarcar a la población de riesgo. Hay pacientes que no son valorados hasta que no van por la cuarta fractura”



Pablo Talavera
Representante de UCB
“Hay que hacer entender a la gente que no se ha fracturado porque se ha caído, sino que su hueso es débil y la caída ha sido el detonante”



Mª Antonia Robles Palacios
Presidenta de Aecosar
“Hay que hacer campañas de concienciación y dar una orientación preventiva a los pacientes para que se cuiden”