Como si de un deja vú se tratara, tres semanas después de que los enfermeros hicieran su intento de reunirse en el Ministerio de Sanidad con las comunidades autónomas, los médicos han tenido su oportunidad, aunque, eso sí, fallida. La historia se ha vuelto a repetir: los ocho consejeros socialistas optaron por no acudir a la llamada ministerial.
A pesar de todo y de que la jornada se vislumbraba algo ‘gris’, algunos compromisos del Ministerio de Sanidad sí que han conseguido.
Sin embargo, no era una sorpresa que las comunidades socialistas se desmarcan de esta Conferencia Médica que, por cierto, llega cinco años tarde, en palabras de las organizaciones médicas. Una “irresponsabilidad”, a juicio de la Ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, que compareció ante los médicos de comunicación para valorar el desplante y mostrar el “compromiso” del Gobierno y el PP con la profesión médica.
Un compromiso que trasciende al Consejo Interterritorial y que se podría materializar en dos sillas fijas en los cónclaves autonómicos a partir de 2019. Claro que, supondría un cambio en el reglamento, que por otra parte sigue sin llegar a un acuerdo en su funcionamiento.En cualquier caso, el próximo 24 de abril los consejeros tendrán la oportunidad de volver a negociarlo y dar su opinión sobre esta decisión de la ministra en el próximo cónclave autonómico.
De hecho, otorgar un sitio clave a los profesionales fue el ‘caramelo’ de Sanidad para retener a la profesión e impedir que abandonaran el encuentro, tal y como aseguraron al conocer el ‘desplante’.
Respaldada por las autonomías populares —no todos los consejeros estaban presentes, aunque sí enviaron a emisarios al encuentro— Montserrat junto al secretario general de Sanidad, Javier Castrodeza, acusó a los socialistas de intentar “politizar y neutralizar” la salud de los españoles, la sanidad y “todos los grandes éxitos” logrados en los últimos 40 años.
“Oportunidad de diálogo perdida”, “decepción”, algunas de las sensaciones en los rostros de los miembros del Foro de la Profesión Médica. Más allá de reproches, el encuentro sirvió para volver a sentar las bases de unos acuerdos que quedaron en el olvido desde que se firmaron en 2013. Avanzar en el Registro Estatal de las profesiones para su puesta en marcha será uno de los ejes, que, en palabras del Ministerio, permitirá mejorar la planificación de las necesidades de recursos humanos e implantar las mejores políticas.
Asimismo, debatir, “con la reflexión previa del foro”, sobre los perfiles profesionales para la cobertura de puestos y su movilidad, reducir la precariedad y la recuperación de los derechos perdidos durante la crisis económica. Respecto a la reválida de las competencias de manera periódica y voluntaria se acordó impulsar la norma reglamentaria (Real Decreto) o alcanzar un acuerdo en el Consejo que lo regule.
La gestión clínica está también en la lista, aunque no se librará de pasar por el Cisns. Además, la formación continuada de los profesionales, el déficit de especialistas, así como la formación MIR son cuestiones que al menos de aprobarse el reglamento del Consejo Interterritorial podrán consensuarse con las profesiones.