J. Ruiz-Tagle Madrid | miércoles, 30 de enero de 2019 h |

La Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados se ha reunido para atender a las comparecencias de varios miembros del Ministerio de Sanidad en relación al proyecto de Presupuestos Generales del Estado. El secretario general de Sanidad, Faustino Blanco, y el subsecretario, Alfredo Gómez, han sido los encargados de explicar a los diputados las cuentas que pretenden aprobar en marzo en la Cámara Baja. Una de las mayores críticas que han recibido durante su exposición ha sido el presupuesto destinado al Fondo de Cohesión (3,7 millones de euros, al igual que el año pasado) habidas cuentas de que el PSOE en su labor de oposición hasta hace unos meses reiteraba que debía tener 100 millones. La defensa de Blanco ante las críticas, sobre todo de los grupos de Ciudadanos y Partido Popular, ha sido la de fomentar la facturación que las comunidades autónomas realizan por atender a ciudadanos extranjeros de la Unión Europea que son tratados en España.

El secretario general ha explicado que existen dos fondos, uno global y uno real, que acumulan el dinero por esta partida. El primero hace referencia a los ciudadanos europeos residentes en España, por los cuáles el Estado de procedencia paga una cantidad para cubrir su sanidad. Por otro lado, el segundo de los fondos hace referencia a los turistas que son tratados en nuestro país. “El año pasado hubo un saldo positivo de 61 millones de euros y pueden destinarse a cubrir parte del Fondo de Cohesión”, aseguró al tiempo que pidió a las comunidades autónomas que “fomenten esta facturación”.

Asimismo, Blanco recordó que los Presupuestos vienen acompañados de una modificación legislativa que afectará al Real decreto 16/2012 y que permite la remodelación del Fondo de Cohesión y del FOGA. “La Comisión Delegada del Consejo Interterritorial va a trabajar para que cumplan sus objetivos”, dijo.

Otra de las críticas vertidas hacia el Gobierno por parte de los grupos de la oposición fue la falta de fondos específicos para la universalidad y la remodelación del copago (unos 390 millones según cálculos del propio ministerio). Blanco aseguró que la primera de las medidas no tendrá impacto mientras que la segunda podrá ser sufragada con los 6.500 millones que se enviarán a las comunidades autónomas. “Podrían haber sido más pero PP y Ciudadanos se han negado a modificar la regla de gasto para el cumplimiento del déficit”, señaló.