La sociedad y los profesionales sanitarios se han echado a la calle este domingo en la capital bajo el lema “Madrid se levanta por la sanidad pública”. La movilización, convocada por diversos colectivos sociales, fue seguida por 200.000 personas según datos de la Delegación del Gobierno, mientras los convocantes aseguran que los cuatro recorridos por la capital madrileña han reunido a cerca de 670.000 personas descontentas con la situación sanitaria y los planes de futuro para la sanidad madrileña.
El telón de fondo, la polémica suscitada en torno a la reapertura de los servicios de urgencias extrahospitalarias, la parte más reciente y visible, en cualquier caso, del malestar de una parte de la sociedad madrileña y profesionales contra lo que consideran “un plan para desmontar la atención primaria en la región”.
“Una manifestación en clave política” para Ruiz Escudero
El consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha subrayado que se trata de “una manifestación en clave política, jaleada por Más Madrid, que no condiciona el trabajo por la sanidad madrileña con el objetivo de que siga creciendo”.
En declaraciones a la Sexta, el consejero remarcó que, “probablemente, la madrileña es la mejor sanidad de España y en esa línea es en la que se debe seguir trabajando”.
De igual modo, hizo hincapié en que “las manifestaciones no hacen que se elijan gobiernos”, que se eligen en las urnas, “y es lo que legitima para poder gobernar y aplicar las políticas sociales en nuestra región”. “Tenemos que seguir trabajando para mejorar la sanidad madrileña”, añadió.
“La reunión que se mantuvo con los sindicatos el viernes es la vía para buscar soluciones y conseguir un acuerdo para que la huelga se desconvoque en Madrid”
Enrique Ruiz Escudero, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid
Según su análisis, lo que condicionará el acuerdo para frenar la huelga en Madrid no es la movilización, sino “la reunión que se mantuvo con los sindicatos en Mesa Sectorial Extraordinaria haciendo un análisis de la puesta en marcha del plan y buscando soluciones y acuerdo para que la huelga se desconvoque en Madrid”, sentenció.
En la misma línea, el consejero destacó que los presupuestos para la comunidad previstos para el próximo año recogen 700 millones de euros más para sanidad. Remarcó, además, que el 25 por ciento del presupuesto total sanitario se destina a atención primaria, un total de 2.440 millones de euros.
“Desde septiembre de 2019 a septiembre de 2022 se ha aumentado en casi 5000 profesionales, de los que casi 700 son de atención primaria. Los datos son rotundos. Se ha crecido en personal y en presupuesto. Lógicamente hay líneas de mejora”, admitió. Para finalizar, Ruiz Escudero puntualizó que “el problema de los médicos de familia es un problema en el que el Ministerio no se ha puesto a trabajar. Ocurre en todas las comunidades autónomas y le garantizo que si sucede en Madrid en otras comunidades ocurre mucho más”.
Un “clamor” para Más Madrid
Frente a esta visión, la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García Gómez, remarcó que la movilización supone un “clamor”. “No se toca la sanidad pública. No se toca la joya de la corona”, espetó. García Gómez pidió un paso al frente por parte de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. “Tiene que escuchar esta manifestación y tomar responsabilidades políticas. O se va el consejero, o se va ella, o se va todo el gobierno del Partido Popular porque lo que está haciendo es una ‘chapuza sin precedentes'”, defendió Mónica García desde la movilización.
“Tenemos un problema y en gran parte tiene que ver con el plan de urgencias extrahospitalarias en el que han destrozado las condiciones laborales”
Ángela Hernández, secretaria general de Amyts
Por su parte, el sindicato profesional Amyts, que instó a seguir la movilización impulsada por los movimientos vecinales de la capital, ha defendido esta mañana en una entrevista con Espejo Público, su visión, sin entrar en la lucha de cifras. “Tenemos un problema y en gran parte tiene que ver con el plan de urgencias extrahospitalarias en el que han destrozado las condiciones laborales”, ha reconocido su secretaria general, Ángela Hernández.
Asimismo, ha recordado que Amyts es un sindicato profesional con competencias autonómicas. “Aquí solo echan la culpa los unos a los otros. Hay problemas en todo el país, pero las competencias están transferidas a las comunidades autónomas”, según ha remarcado.
Pasos en la negociación
La Mesa Sectorial Extraordinaria celebrada el pasado viernes 11 de noviembre se saldó sin grandes avances en la negociación. A día de hoy, según ha detallado el consejero, Sanidad espera que los sindicatos participantes contesten la propuesta realizada. A partir de ahí “tratarán de avanzar para que se desconvoque la huelga y llevar el plan con absoluta normalidad, que será posible una vez que la huelga esté desconvocada”, subrayó Ruiz Escudero.
La profesión en pleno, crítica con una apertura de los PAC “desorganizada”
Al margen de la movilización política y del descontento expresado por las organizaciones sindicales, a finales de la semana la profesión médica en pleno ofreció su análisis sobre la situación sanitaria en la región y plasmaron la postura común en un manifiesto. En un acto celebrado en el Colegio de Médicos de Madrid, y en el que participaron sociedades científicas y entidades colegiales de ámbito regional y nacional, los portavoces hicieron hincapié en la desorganización en la apertura de los puntos de atención continuada (PAC).
Una descoordinación que se observa, según su visión, tanto a nivel de personal como de material, con los cambios forzados en condiciones laborales realizados de forma precipitada, con órdenes verbales de desplazamiento sin dejar constancia por escrito y fallos en sistemas informáticos. En muchas ocasiones avisando a los profesionales con un mensaje al correo institucional enviado de madrugada, con el cambio de lugar y horario de trabajo a escasas horas del inicio de la jornada.
Los portavoces insistían en que la reapertura de los nuevos centros se ha planteado careciendo del mínimo material indispensable (en muchos no había ni electrocardiógrafo ni desfibrilador).
A este análisis, hay que sumar lo que la profesión remarca como unas desafortunadas declaraciones en torno al boicot de los profesionales que han podido favorecer un clima de animadversión hacia los facultativos, según trasladaron.
Las entidades firmantes solicitan que se revierta esta reestructuración hasta que se realice de forma consensuada con los profesionales, teniendo en cuenta la carga y continuidad asistencial, las peculiaridades geográficas (distancia al hospital) y la conciliación familiar.
Asimismo, proponían que la implantación de videoconsulta se realice siguiendo protocolos estrictos, como herramienta complementaria y en ningún caso sustitutiva de la presencia física del facultativo, ya que el contacto directo con el paciente y la exploración física es particularmente importante en situaciones de urgencia.
Por último, los portavoces hicieron voz común para solicitar que se alcance una inversión en atención primaria del 25 por ciento de lo dedicado a sanidad y el regreso a la jornada de 35 horas. Al mismo tiempo, trasladaron un mensaje de colaboración de cara a trabajar en el diseño de un plan “progresivo y adecuado”.
