El homenaje a las víctimas de la pandemia de la COVID-19 y de reconocimiento al personal sanitario que dio su vida ha congregado a múltiples personalidades a nivel nacional en la Plaza de la Armería del Palacio Real en un solemne acto en que participaron los Reyes. Una vez se ha dado paso al encendido del pebetero, se han sucedido las declaraciones institucionales de los representantes de los fallecidos a causa del virus y de los sanitarios. A continuación, ha dado comienzo la ceremonia, en la cual cuatro de estas familias han recibido de manos de Su Majestad la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, en representación de todas y todos los sanitarios homenajeados.
También han asistido los familiares de 102 trabajadores y trabajadoras del sector sanitario fallecidos durante la pandemia, procedentes de todo el país, así como los primeros vacunados de varias CC.AA. La presencia de estos últimos ha buscado así simbolizar la fuerza de la vacunación, la esperanza de la salida de la pandemia y el valor del colectivo más afectado por la mortalidad en esta pandemia.
Tras la entrega de condecoraciones, Felipe VI ha depositado junto al pebetero una corona de flores, y posteriormente, tuvo lugar un minuto de silencio, a la que ha proseguido la intervención de Araceli Hidalgo, primera vacunada contra la COVID-19 en España.
La intervención de Felipe VI
Así, el Rey ha señalado el “profundo respeto, reconocimiento y admiración al personal sanitario que, desde los inicios de esta crisis, trabajó sin descanso, con determinación y total entrega tratando de contener una enfermedad para la que, en esos momentos, no se disponía de tratamientos ni vacunas”.
Asimismo, ha querido subrayar la labor de “quienes desempeñaron funciones esenciales en los momentos más duros. A todos —mujeres y hombres— que, en los días más sombríos, antepusieron su deber a su seguridad, actuaron de acuerdo con su conciencia cívica y solidaria, y dieron lo mejor de sí mismos, aportando como profesionales todo lo que sabían y, humanamente, todo el coraje y la voluntad que pudieron”.